Los argumentos que ayer puso sobre la mesa el delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada, para justificar la actuación del Gobierno central sobre la circunvalación Norte, con duras acusaciones hacia el anterior ejecutivo del PP, no convencen al diputado popular Celso Delgado, al que el primero no dudó en acusar de "no hacer nada en los últimos siete años", ya que mantiene que "estaba en condiciones de poder ser licitado el proyecto del primer tramo de la circunvalación en 2018".
Además de recordar Delgado que la partida que se había destinado en su momento por los populares está prorrogada, reconoce que estaba pendiente esa auditoría de seguridad, pero advierte que se "fue dilatando en el tiempo", de lo que responsabiliza el gobierno socialista. Para cargar con las consignaciones presupuestaria para próximos ejercicios, desde el millón de euros a los "no más de 14 millones frente a los 30 millones que es el coste total", lo que califica como un "despropósito".
El que de nuevo se sumó la controversia fue el alcalde, Jesús Vázquez, que al ser preguntado en un programa de la emisora local de Radio Ourense-Cadena Ser, no dudó en señalar a los medios de comunicación de "intentar enfrentarnos a uno y a otros" sobre un asunto que no dudó en denominar de "fundamental para el futuro del la ciudad y su desarrollo socioeconómico. Aunque posteriormente, y con el objetivo de rebajar la tensión después del llamamiento a ese "frente común", fue el de asegurar que "yo intento ser cordial".
Al igual que había señalado en su comparecencia pública del miércoles, volvía a reafirmar su proclama: "Quiero ser Jesús, y soy de Ourense", para esa unidad de acción que no contó con el respaldo de los otros grupos políticos.
