Un rojo intenso colorea el mapa de riesgo de incendios en toda Galicia salvo en la cornisa norte. La elevada probabilidad de que el monte arda -el nivel era extremo ayer, superior al 81 %- se materializa en pleno octubre. Un año después de la catástrofe incendiaria en Galicia -cuatro víctimas mortales y 49.200 hectáreas calcinadas en la comunidad, en un total de 264 frentes-, la amenaza reaparece. La bajada de las temperaturas y las posibles lluvias de hoy marcarán el devenir. En la provincia de Ourense, el fuego ha arrasado unas 170 hectáreas entre la noche del jueves y este viernes en espacios naturales de alto valor, como la Ribeira Sacra y el Parque Natural del Xurés.

Además, un foco que permanecía activo ha calcinado al menos 39 tras cercar ayer por la tarde la autovía das Rías Baixas, A-52, a la altura de Ábedes, en el municipio de Verín, propagándose ladera arriba.

En el kilómetro 155 del sentido Benavente, las llamas y el humo afectaron parcialmente al carril derecho desde las 17 horas de este viernes. En el tramo hay tres bandas de circulación, por lo que el impacto en el tráfico fue mínimo, según la Guardia Civil. No fue necesario cortar la calzada, pero sí se cerró parcialmente el margen derecho para que los medios de extinción pudieran atacar el incendio desde la plataforma. Acudieron al lugar del incendio tres patrullas del instituto armado -dos de Tráfico y otra de Seguridad Ciudadana-, así como numerosos medios aéreos y terrestres: 4 agentes, 9 brigadas, 5 motobombas, 1 pala, 4 helicópteros y 2 aviones.

Un nuevo incendio ya controlado en A Gudiña, parroquia de A Barxa, y afecta por el momento a otras 47 hectáreas. En el trabajan 8 agentes, 13 brigadas, 11 motobombas, 2 palas y un helicóptero. Este no ha sido el único fuego que ha afectado a esta zona porque en la parroquia de Pendes se ha controlado otro incendio después de que ardiesen 10 hectáreas al lado de la vía del tren.

Los incendios forestales de los enclaves naturales de la Ribeira Sacra y el Xurés comenzaron tras caer la noche, cuando ya no pueden intervenir los medios aéreos por falta de visibilidad. En el primer caso, hubo tres focos iniciados con pocos minutos de diferencia y una distancia inferior a los 500 metros, en las proximidades de Loureiro, en la parroquia de Santo Estevo de Ribas de Sil. El frente avanzó durante la noche, desde el origen de las llamas, en torno a las 21.10 horas. La Consellería de Medio Rural dio por controlada la situación a las 19.18 horas de la tarde de este viernes, después de que el fuego hubiera arrasado unas 150 hectáreas de terreno. Trabajaron en la lucha contra las llamas 2 técnicos, 8 agentes, 33 brigadas, 16 motobombas, 1 pala, 5 helicópteros y 1 avión, según la Xunta de Galicia.

Pese a su protección ambiental, los incendios castigan de un modo inmisericorde al Xurés desde hace varios lustros. A los fuegos que comienzan en el perímetro del parque se suman otros que llegan desde Portugal. El último foco comenzó de noche, a las 22.05 horas del jueves, en la parroquia de Requiás, municipio de Muíños. Afectó a un robledal centenario en la Serra da Barxa, junto a una ruta de senderismo. Según la Xunta, ardieron 18 hectáreas y el frente quedó estabilizado a las 19.26 horas. Han colaborado en el operativo -son cifras de Medio Rural- 7 agentes, 21 brigadas, 6 motobombas, 1 pala, 6 helicópteros y 3 aviones.

Los alcaldes de ambos municipios aprecian una intencionalidad "clara" en estos incendios. "Fueron tres focos casi simultáneos en un círculo, tengo muy claro que han sido provocados pero no podemos acusar a nadie porque no vimos quién lo hizo", sostiene César Parente (PP), regidor de Nogueira de Ramuín. Su homólogo en Muíños, Plácido Álvarez (PP), apunta a una mano criminal "que quiere hacer el aniversario del año pasado", en alusión a la ola de incendios que desbordó la capacidad de extinción de Galicia, el fin de semana del 14 y el 15 de octubre de 2017. El último incendio del Xurés tuvo lugar en una "zona inaccesible para vehículos a motor", dice Plácido Álvarez.

En declaraciones a Europa Press, el también portavoz del grupo de gobierno en la Diputación incidió en el afán incendiario con el Xurés. "No se puede acusar sin pruebas claras, pero sospechas las tenemos todos. Siempre hay caprichos e intenciones malas. Alguien se está encargando de cargarse la comarca. Prácticamente nos han quemado todo".

Prohibidas quemas y parrilladas

Hasta nuevo aviso, y si el tiempo no lo remedia, la Consellería de Medio Rural mantiene la prohibición de quemas agrícolas y forestales. Tampoco se autorizan parrilladas en zonas agrícolas y forestales catalogadas de alto riesgo, de las que forman parte 62 de los 92 municipios de la provincia de Ourense.