La delincuencia ha crecido en la provincia de Ourense un 6,2 % tal y como refleja la estadística más reciente del Ministerio del Interior, que analiza los datos recogidos entre enero y junio de este año. El incremento general contrasta, sin embargo, con la disminución del número de determinadas infracciones como los robos y hurtos. Las sustracciones disminuyeron más de un 12 % en el primer semestre, pese a un total de 851 hechos registrados. El último del que ha tenido constancia la Guardia Civil ocurrió en Baños de Molgas. Según la Comandancia del instituto armado en Ourense, dos varones se hicieron pasar por empleados de una compañía de electricidad y hurtaron el 24 de agosto, en el interior de un domicilio habitado, 2.500 euros además de varias joyas.

Por otra parte, la Guardia Civil ha esclarecido dos hechos, un incendio forestal y una agresión. Un vecino de Porqueira está investigado como presunto responsable de un delito de incendio forestal por imprudencia. Las llamas afectaron a 0,5 hectáreas de monte raso el 23 de agosto. Comenzó mientras esa persona hacía tareas agrícolas con un tractor. Chispas del tubo de escape del vehículo provocaron presumiblemente las llamas, según la principal hipótesis.

Además, un vecino de Lalín (Pontevedra) tendrá que rendir cuentas en el juzgado como presunto autor de un delito de lesiones. El instituto armado lo considera el responsable de la agresión causada a dos vecinos de la localidad de O Carballiño, el sábado 18 de agosto.

Precisamente, este tipo de hechos catalogados por Interior como delitos graves y menos graves de lesiones y riña tumultuaria crecieron un 15,8 % en la primera mitad de este año, con un total de 44 delitos conocidos por las fuerzas de seguridad en toda la provincia. En el mismo periodo del año anterior se habían registrado 38 infracciones penales de esta clase, según la estadística oficial, que sirve de referencia para medir el estado de la seguridad ciudadana.