M. M. S. S., un hombre de nacionalidad portuguesa con antecedentes penales no computables a efectos de reincidencia, se conformó ayer con una condena de 31 días de trabajos en beneficio de la comunidad como responsable de un delito contra la seguridad del tráfico. Fue sorprendido a pesar de que nunca obtuvo el permiso.

Agentes de la Guardia Civil lo interceptaron a las 12 del mediodía del 4 de octubre de 2017, cuando circulaba en un ciclomotor por la vía OU-406. Le dieron el alto en el punto kilométrico 0,5 de la carretera.

Los guardias comprobaron que el encausado carecía del permiso de conducir, debido a que nunca lo había obtenido con anterioridad. La Fiscalía solicitaba en principio una multa de 6.480 euros para el acusado. Aceptó trabajos comunitarios.