J. M. R. D., el acusado de abusar de una pariente menor de edad a cambio de drogas, solo declaró ayer a preguntas de su abogado, en el juicio que hoy finaliza y que se celebra a puerta cerrada en la Audiencia Provincial de Ourense. El individuo niega los delitos -pese a que no supo explicar por qué tenía 1,8 kilos de droga en su casa- y solo admite que dio un masaje a la víctima durante un encuentro en un hostal. Ella, que tenía 16 años cuando ocurrieron los hechos, cambió ayer su declaración en la vista y coincidió con esa manifestación del encausado. En el juzgado, durante la fase de instrucción y en dos exploraciones, la menor había dicho que el encausado llegó a abusar de ella. La víctima sí confirmó ayer que el hombre le llevó droga, una acusación que él también niega.

La defensa, que ejerce al bogado Óscar Carballo, solicita la libre absolución. El fiscal Carlos Valenzuela pide un total de 18 años de prisión por los presuntos delitos de abusos sexuales, contra la salud pública y corrupción de menores. Entre las pruebas constan audios y vídeos distribuidos por Whatsapp. J. M. R. D. comparece en el juicio bajo custodia policial. Está en prisión preventiva por estos hechos desde octubre de 2016.

Según el escrito de acusación de la Fiscalía, el acusado supuestamente persuadió a la familiar menor para que le enviase por la aplicación Whatsapp fotos y vídeos de ella desnuda. Se enfrenta a la petición de un total de 18 años de prisión por los delitos de corrupción de menores (3 años), abuso sexual (7 años) y contra la salud pública (8 años), así como una multa de 194.432 euros por el delito de tráfico de drogas y 10.000 euros en concepto de indemnización a la víctima por los daños morales que le causó.

La acusación de la Fiscalía

El relato recogido por el fiscal en su escrito de acusación sitúa los hechos entre el 1 de enero y el 7 de febrero de 2016. El acusado, que según la acusación se dedicaba de modo habitual a la venta y distribución de droga, especialmente marihuana y cocaína, aprovechó presuntamente la condición de "consumidora" de la menor para someterla a una "labor de persuasión" a través de conversaciones por Whatsapp. De tal modo que "acabó convenciéndola para que le enviara fotos y vídeos de contenido sexual prometiéndole a cambio proporcionarle drogas".

La menor cayó en la red y durante más de un mes envió una gran cantidad de archivos gráficos en los que posaba desnuda o en ropa interior de "elevado contenido sexual". En ocasiones, siempre según la versión del ministerio público, el acusado llegó a remitirle imágenes de mujeres desnudas para mostrarle cómo quería que fuesen las fotos. Él mismo le envió imágenes suyas a ella en las que se le veía desnudo.

El 2 de febrero, con el propósito supuestamente de entregarle la droga que le había prometido, la citó entre las 15.30 y las 18.30 horas en un hotel restaurante en el que tenía alquilada una habitación. Fue ahí donde, "aprovechándose de la superioridad que tenía sobre ella, por su mayor edad", y supuestamente favorecido porque la menor había fumado un porro, sostiene la acusación, abusó de ella.

Según esta versión, le dijo presuntamente que se quitara la ropa "y con ánimo libidinoso, le hizo diversos tocamientos por todo el cuerpo", y abusó de ella "sin contar con su consentimiento". Tras ocurrir estos hechos, el acusado supuestamente le entregó dos gramos de cocaína, marihuana y cuatro paquetes de tabaco. Por auto de fecha 20 de octubre de 2016 dictado por el Juzgado 2 de Verín, tras la denuncia, se autorizó la entrada y registro en el domicilio del investigado, en el que se encontraron diferentes cantidades de droga que suman un total de 1,8 kilos de cocaína y 0,5 gramos de cannabis.

Casi 65.000 euros en droga

Las sustancias incautadas tendrían un valor total de mercado de 64.810 euros. El acusado tenía también en su poder instrumentos para el pesaje de la droga y 208,5 euros procedentes de la venta de las sustancias estupefaciente .

Además de las penas de prisión que podrían sumar 18 años, el ministerio público solicita también por el delito de corrupción de menores y abuso sexual un total de 12 años de alejamiento de la menor.