George A. G., un hombre de 25 años y nacionalidad rumana, aceptó ayer una condena de un total de 15 meses de prisión por malos tratos a su exmujer y también por amenazas.

El acusado fue pareja de la víctima hasta febrero de 2013. Una vez rota la relación, la llamó de modo reiterado durante el mes de septiembre de ese año, diciéndole que la iba a matar, a romperle la cabeza y a llevarse a su hijo. Además, también la amenazó con que iba a mandarle "a unos amigos rumanos".

También se considera probado que, en una ocasión en la que el acusado estaba en el Jardín del Posío de Ourense, en presencia del hijo menor de ambos, el individuo empujó a la mujer. La víctima no sufrió lesiones ni recibió asistencia sanitaria por esos hechos.

En todo caso, se dictó un auto que prohibió al imputado acercarse a menos de 500 metros de la víctima, así como comunicarse con ella por cualquier medio durante el tiempo de tramitación de la causa. El alejamiento se convierte ahora en una medida firme con la condena de conformidad sellada ayer.