La controversia sobre los contenedores subterráneos, que tendrá hoy un nuevo capítulo en el pleno que celebra la corporación municipal con la moción que presentó Democracia Ourensana, llevó ayer al alcalde a evitar cualquier tipo de confrontación con la oposición, especialmente con los socialistas, después de las críticas dirigidas hacia el gobierno popular.

"No voy entrar en polémicas. Debemos ser positivos", proclamó Jesús Vázquez, aunque en respuesta al portavoz socialista, Vázquez Barquero, que lo acusó de "perder 9 meses", se limitó a clarificar que "son 8 meses, no 9, frente a los 8 años que gobernaron, la diferencia es evidente". Y apostillar que "no se hizo un buen trabajo -en alusión a los contenedores subterráneos- en los últimos años".

En lo que también incidió el regidor es que las opciones de solución del problema están perfectamente definidas, en función de la auditoría externa, que es un informe global de la situación en que se encuentran, ya que "lo que habían eran informes parciales, pero sin concretar la realidad en su conjunto", indicó.

Dicho lo cual, mantiene Vázquez que la decisión final debe ser objeto del debate que va tener lugar hoy en el pleno, pero revela que de acordarse la reparación de todos los contenedores, en total 72, que según las estimación de la auditoría supera los 1,3 millones de euros, "estaría sujeta a una modificación de crédito"

Un mensaje que tuvo su componente crítico hacia la oposición, sobre todo DO y PSOE, en el sentido de que "se piden y exigen determinadas cuestiones, pero luego votan y rechazan aprobar las modificaciones de crédito que plantea el gobierno", que al estar en minoría no las puede sacar adelante. Y reiterar que la otra opción es el sellado, cuyo coste supera los 500.000 euros.