El portavoz del PP municipal, Rosendo Fernández, describió la cabalgata como la "alegoría de lo que supuso este gobierno municipal para la ciudad". Y se refirió con esto a la "falta absoluta de gestión y de capacidad para reaccionar ante imprevistos, solo preocupado de vender las excelencias de un evento que todos recordaremos como un rotundo fracaso". Para Fernández, más que una anécdota, lo ocurrido el día 5 fue "extremadamente grave" si se mira con responsabilidad.

La organización de la Navidad fue para el PP "un desastre de principio a fin", empezando por el retraso en la iluminación navideña "la última ciudad española en encenderla", y que además, "no dio cobertura a las zonas de siempre".