Lo que puede tener más recorrido, no solo en el plano político, es el famoso préstamo "verbal y humanitario", denominación que le daba el alcalde Agustín Fernández a un funcionario del Concello de Ourense -el jefe del servicio de Recaudación-, con fondos de la asignación del grupo municipal socialista, por entender el portavoz del grupo municipal del Partido Popular, Rosendo Fernández, que puede ir más allá de lo que se entiende por "impropio".

Fue otra de las cuestiones que se abordó en la reunión de la junta de portavoces, debido a que sobre el préstamo, de algo más de 21.000 euros, los populares tienen "algo más que dudas razonables", es por eso que esperan contar con toda la documentación que solicitaron al grupo de gobierno para posteriormente tomar las medidas que consideren oportunas, sin descartar ninguna, incluida la vía judicial, posibilidad que en su momento trasladó al propio alcalde.

Y aunque Agustín Fernández aseguró ayer que "no hay nada que consensuar o aclarar" al respeto, debido a que al portavoz del PP "le fue puesto a su disposición las entregas y justificantes del préstamo y reembolso de las cantidades", y la disposición del propio funcionario para a hablar con los grupos, los populares señalan como "extraño" que no aparezca reflejado en la contabilidad del grupo socialista en los últimos años, como reconocía el alcalde.

Se trata de un dato relevante para Rosendo Fernández, así como que del préstamo no tuvieran conocimiento otros miembros del grupo de gobierno socialistas, además de que se le conceda a un funcionario de "alto nivel", con unos ingresos anuales que superan los 50.000 euros, y por parte del alcalde se invoque lo de "humanitario y solidario" para justificar una forma de proceder que tiene indicios de supuesta ilegalidad.

Acuerdo entre partes

Una cuestión esta que rechazó Agustín Fernández, aunque evitó realizar concreciones a las preguntas realizadas en el pleno del 9 de mayo por el portavoz popular como de la edil de DO, Susana Gómez, que llegó a advertir de un supuesto delito fiscal, por tratarse de fondos públicos y que no habrían seguido los procedimientos establecidos, debido a que no hay documentos que así lo acrediten, al menos no fueron facilitados por el alcalde y el grupo de gobierno.

De ahí que, después de reiterar que ese préstamo "no pasó por el notario ni por la Consellería de Facenda de la Xunta", Rosendo Fernández señale que se trata de un "acuerdo entre partes, pero con dinero del Concello", algo que como recalcó "no se puede hacer".

También advierte que los papeles que le mostró Agustín Fernández, como el acuerdo que en su momento habían adoptado algunos miembros del grupo socialista para conceder el préstamo, así como los justificantes de devolución de cantidades, "están con firmas ilegibles", por lo que, cuando los tenga en su poder el PP, los estudiarán sus asesores jurídicos y "decidiremos".