El ente público Portos de Galicia asegura que va a actuar contra el estacionamiento de autocaravanas en el muelle de Aldán, después de la llegada masiva de estas casas móviles el fin de semana en una situación que provocó quejas de vecinos. El domingo, las autocaravanas llenaban las plazas de estacionamiento del malecón, frente a las casetas de los marineros,en una hilera continua y sin respetar tampoco el distanciamiento social que obliga la pandemia del Covid-19. Desde Portos de Galicia reconocen la problemática y confirman que se va a regular la situación.

La manera en que se va a actuar y según señalan, es intensificando la vigilancia por parte de los guardacostas del muelle, además de con la colocación de señalización de prohibido estacionar para las autocaravanas, ya que ahora no existen. Entienden que deben hacerlo en las áreas específicas para ello. La Policía Local de Cangas confirma que en Cangas no hay un área pública específica para el estacionamiento de autocaravanas, salvo la que existe detrás del pabellón del Gatañal y es para abastecimiento de agua y aseo; y añade que estas casas móviles pueden estacionar donde quepan, excepto en Rodeira en donde está prohibido este aparcamiento. Añaden que esta medida también se va a ampliar a la zona de playas de Viñó. Nerga y en Donón, en donde está la Caracola.

La llegada masiva de estas casas rodantes al muelle de Aldán volvió a reabrir la herida de los vecinos con Portos que comenzó tras el verano pasado cuando intentó colocar hasta 12 contenedores de reciclaje para uso como casetas de marineros, justo donde este fin de semana aparcaron las autocaravanas. Portos y la cofradía defendían esas casetas por entender que el espacio portuario era para uso de los marineros y al final se colocaron seis pero contra la lonja, sin tapar las vistas al mar. La colocación de las casetas llegó también después de una medida nada popular cuando Portos dejó extinguir la concesión del kiosco anexo a la cofradía en donde estaba el mítico restaurante Muelle, por donde pasaba todo el turismo de O Morrazo. Los vecinos se preguntaban este fin de semana por qué Portos no dejaba un restaurante en el muelle y permitía las autocaravanas.