El compañerismo y la apuesta por convertir el patio del recreo en un lugar de verdadera inclusión y de juegos para todos tiene premio. Bien lo saben en el colegio Montemogos de Beluso, que acaba de ganar el concurso nacional "Por mí y por todos mis compañeros", que convoca la ONCE desde hace ya 35 años. El colegio presentó un proyecto titulado "Por un recreo inclusivo", que fue elegido como el mejor en la categoría B (para alumnado de 5º de Primaria).

La propuesta tenía dos partes. La primera fue la creación de lo que denominan como una "patrulla del patio", formada por 14 estudiantes de entre 10 y 11 años. Su misión es hacer consciente al conjunto del alumnado de su propia diversidad de capacidades con el objetivo de que nadie se quede sin jugar durante el tiempo del recreo. Así, además del omnipresente fútbol, promovieron la práctica de otras actividades que permitiesen a todo el alumnado jugar y disfrutar de ese momento de ocio, con independencia de sus capacidades físicas. En ese reto encontraron sus mejores aliados en los juegos tradicionales, que se demostraron como una de las mejores alternativas de inclusión. Al mismo tiempo a lo largo del curso se desarrollaron otro tipo de actividades, como la proyección de la película "Campeones".

El colegio plasmó todo ese trabajo en un original cartel, que simula ser un puzle. Cada una de las piezas es una fotografía que ilustra alguna de las múltiples actividades y juegos inclusivos que se impulsaron durante todo el curso. El diseño tiene un título "Diversi-On". la primera parte está escrita en lenguaje de signos y en braille con los colores del arcoiris, una forma de representar la diversidad. Ese "diversi" alude tanto a diversidad como a diversión. Y la diversión es precisamente el objetivo que debe tener el recreo para todos los niños y niñas. La segunda parte del lema, "On", alude a la voz inglesa que significa "encendido" o "activo". "Nos referimos al modo en el que nos encontramos en nuestra escuela en relación con la diversidad y la inclusión de las personas", explican.

El mural es un reflejo de todos los juegos que se realizan durante la hora el recreo en el colegio de Beluso. "Es un puzle en el que todas las piezas encajan, como encajan todas las niñas y niños jugando en nuestra escuela", afirman desde Montemogos. El mensaje que se transmite con es nítido y contundente. "Nuestro puzle no tiene límites porque queremos dar la bienvenida a cada niña y cada niño en cada juego del recreo", resumen.

Orgullo

El colegio de Beluso ha recibido con alegría y orgullo este premio a nivel nacional. El curso pasado ya participó en la fase autonómica, en la que consiguió un premio de 400 euros. Ese resultado le permitió concurrir este año en la fase nacional, donde su trabajo ha vuelto a ser merecedor del reconocimiento de la ONCE. En este caso la recompensa será un viaje a Madrid, para disfrutar de unos días en el Parque Nacional Sierra de Guadarrama de las actividades del campus "Por mí y por todos mis compañeros". La fecha está aún por determinar, pero se prevé que sea a lo largo del mes de junio.