El temporal de viento e intensas lluvias que azotó ayer por la mañana Galicia dejó rachas de hasta 143 kilómetros por hora en el norte de la comunidad. En la comarca las consecuencias se dejaron sentir aunque no se registró ningún incidente especialmente grave. El mayor de los problemas volvió a tener lugar en el barrio moañés de A Marrúa. Las intensas lluvias ocasionaron un nuevo torrente de agua que caía, arrastrando tierra y piedras, desde el Corredor do Morrazo. Los más afectados volvieron a ser los propietarios de la casa de turismo rural Durán. "Desde hace un par de meses extendimos sacos con arena por el jardín para evitar que el agua, con las lluvias, inundase la planta baja de la vivienda, como ocurrió en otras ocasiones", relatan los propietarios de la casa rural. Aunque el jardín quedó inundado "al interior no entró de milagro. Si llueve una hora más tendríamos todo inundado", denuncian para exigir del Concello más implicación para que la Xunta resuelva el problema.

En la calle municipal de Bouza-Figueira el Concello mejoró la canalización de aguas pero la tromba de ayer demostró que esta mejora fue claramente insuficiente. El edil de Urbanismo, Odilo Barreiro, explica que demandaron en varias ocasiones a la Xunta que aprovechase las obras de la autovía para recuperar el antiguo embalse y para construir estructuras de contención de las aguas. "Tenemos el problema desde la construcción inicial del Corredor", advierten desde la Casa Rural Durán, cansados de una situación que se repite cada invierno con la llegada de los temporales.

En Cangas el mayor problema que dejó el temporal se focalizó en la carretera hacia Aldán (PO-315). El viento desprendió uno de los enganches del gran cartel del Hotel Las Vegas, y obligó a intervenir a Protección Civil para asegurarlo. También acudieron agentes de la Policía Local que tuvieron que regular el tráfico, pues por seguridad fue necesario el corte de un carril de la carretera hasta que desapareció el peligro de desplome del cartel.

El viento también fue el responsable de tirar un poste de la luz en la carretera de Herbello. Cayó hacia unas fincas y no causó problemas a la circulación.

Por segunda vez en una semana, usuarios del Corredor avisaron a los servicios de emergencias por la caída de un árbol en uno de los accesos desde Cangas. Personal de Conservación de Estradas acudió con celeridad para retirar el tronco de la calzada.

En Aldán se desbordó una alcantarilla en la carretera general, en el entorno de la alameda de esta parroquia.