La llegada de un frente muy activo que atravesó ayer Galicia dejó en las Rías Baixas vientos de 100 kilómetros en las Rías Baixas que rozaron los 130 en el interior de la provincia de Pontevedra, concretamente en Cuntis, donde se registró una ráfaga de 128,3 km/h. Además del fuerte viento, especialmente intenso durante la madrugada pero que se mantuvo a lo largo de toda la jornada, también se registraron intensas lluvias que dejaron en algunos puntos más de 50 litros por metro cuadrado. Ambos factores provocaron asimismo 150 incidencias en toda la comunidad gallega, donde se suspendieron las actividades en el exterior en todos los centros educativos.

Meteogalicia registró una ráfaga máxima de hasta 99,3 kilómetros por hora en la estación de las islas Cíes y otra de 97,7 kilómetros por hora en el campus de Vigo, ciudad donde los efectivos de emergencia atendieron cerca de medio centenar de incidencias durante el temporal que dejó 16,5 litros por metro cuadrado en pleno centro -las lluvias fueron especialmente intensas por la mañana- y 24 en el campus vigués. No obstante, las inclemencias no afectaron al transporte de ría ni tampoco a Peinador. Bomberos y Policía Local sí tuvieron que acudir al derribo del muro de una casa y tanto ramas como adornos navideños cayeron por el azote del fuerte viento. También se desprendieron chapas en A Madroa.

En la provincia las lluvias dejaron 45,7 litros por metro cuadrado en Cotobade, una cantidad similar a la registrada en Pontevedra ciudad, donde se acumularon 40 litros por metro cuadrado en quince horas. Allí, los servicios de emergencias también tuvieron que acudir por incidencias relacionadas con la caída de árboles, postes y señales, entre otras intervenciones.

Con la flota pesquera amarrada por la alerta naranja hasta el mediodía en toda la costa gallega, Sanxenxo también registró rachas que rozaron los 100 kilómetros por hora aunque en el interior de la ría de Pontevedra la intensidad fue menor, en torno a los 60 o 65 kilómetros por hora, según los datos de Meteogalicia. En la comarca de Pontevedra los incidentes más llamativos se registraron en Poio, con un velero que quedó a la deriva y embarrancó en la playa de Raxó, y la caída de un poste telefónico en la zona de O Vao. Su desplome afectó al servicio y cortó un camino de la zona, además de causar algún desperfecto en una vivienda próxima.

También hubo un reguero de incidencias en Vilagarcía, donde se registraron inundaciones en viviendas y la caída de un árbol afectó la fachada de un inmueble próximo. La calle Nogueira, situada en las inmediaciones del recinto de Fexdega, tuvo que ser cortada a la circulación por la acumulación de agua, que se acabó filtrando a las viviendas próximas. En el estacionamiento del recinto, además, el viento derribó un poste eléctrico que impactó contra un vehículo aparcado. En la localidad vecina de Carril, además, un árbol estuvo a punto de caer sobre una casa.

El temporal de agua y viento que mantuvo activada la alerta hasta las 3 de la tarde de ayer en las zonas de montaña de Lugo y Ourense, dejó las rachas de viento más fuertes de Galicia en punta Lardeira, en la comarca de Carballeda de Valdeorras, donde alcanzó los 158 kilómetros por horas, y una veintena de incidencias en toda la provincia. El agua afectó durante unas horas a las termas do Muiño aunque lo que provocó mayores trastornos fue el desprendimiento de un árbol a causa de la lluvia y el viento en el concello de Coles, que se precipitó sobre la catenaria de la red de ferrocarril, provocando retraso en tres servicios de trenes, entre ellos el Barcelona-Vigo, de entre 50 y 55 minutos.