"Arquitectura alterada", "ramas desequilibradas", "podremias de gran tamaño", "prácticas mínimas de sanidade", "madeira degradada", "ramas mortas", "actividade de insectos xilófagos", "deficiencia fisiolóxica".... Son algunas de las expresiones que definen la situación de los ejemplares que conforman la arboleda del atrio de Darbo según los técnicos de la Estación Fitopatolóxica de Areeiro, dependiente de la Diputación. El informe constata que los plátanos, robles y tilos presentan importantes deficiencias que pueden causar la caída de ramas sobre personas o bienes materiales, así como poner en peligro la supervivencia de los árboles. No obstante, desaconseja realizar intervenciones drásticas, como la reducción de altura a través de poda, por la "presenza de insectos xilófagos" que podrían agravar la situación atacando a las zonas de corte.
El trabajo de valoración del estado de los árboles del entorno de la iglesia parroquial (sobre todo plátanos de sombra y tilos) fue realizado por el jefe del servicio de la Estación de Areeiro, Pedro Mansilla, a instancias del alcalde de Cangas, Xosé Manuel Pazos, y de la concejala de Medio Ambiente, Tania Castro. El objetivo de las evaluaciones es conservarlos y reducir el peligro que supone su deterioro. Los análisis determinan que los plátanos "presentan unha arquitectura alterada, con ramas principais de grandes dimensións (en ocasións tamén desequilibradas entre elas en canto a talla), podremias de gran tamaño que chegan a ocupar toda a superficie do fuste, ocos a diferentes niveis con maior ou menor grao de callos de cicatrización, etc".
Los técnicos consideran que ese estado de deterioro es consecuencia de actuaciones de poda realizadas en el pasado para contener el volumen de la copa "que non foron acompañadas das necesarias prácticas mínimas de sanidade". Además, en la parte alta de los árboles de donde parten las ramas se advierten acumulaciones de agua que vierten hacia el suelo, así como zonas de madeira "máis ou menos degradada". En algunos pies también existe escasa proyección de la copa, restos de poda y ramas muertas e indicios de actividad de insectos xilófagos. Esta misma circunstancia indica que los árboles que presentan esos indicios se encuentran "en estado de deficiencia fisiolóxica", pues se trata, en general, de "insectos oportunistas propios da madeira decaída".
Además de las deficiencias en troncos y ramas, otro de los problemas se localiza a nivel del suelo, donde "parte dos pes presentan unha limitación clara ao bo desenvolvemento do sistema radicular debido ao pavimento que chega preto do colo". Ese hecho, "se sempre é prexudicial, é máis evidente no caso de árbores cun porte tan magnífico" como los del entorno de la iglesia de Santa María de Darbo. Sobre los tilos y robles que conviven en el atrio, Pedro Mansilla señala que comparten signos apuntados en los plátanos de sombra o paseo, "só que o estado dalgúns parece ser máis deficiente, con copas moi reducidas, bugallas ou tumores na cortiza (consecuencia de podas) que rodean toda a circunferencia e abundante madeira morta".
