Tras seis meses de baja por motivos de una enfermedad, el médico Alberto Pérez Freijomil ha regresado a su consulta en el Consultroio de O Hío, en el municipio de Cangas, en donde el doctor es considerado como "un Dios para los vecinos de esta parroquia en donde lleva más de 30 años como médico.
En la actualidad, tal y como señalan vecinos de O Hío, cuenta con 1.500 cartillas a las que atiende con una auxiliar y un técnico de Atención Sanitaria (ATS). Asegura un vecino que en la parroquia no sólo le tienen como buen y querido médico sino como amigo, de ahí que el regreso a la consulta diaria ha sido motivo de felicitación en la parroquia. Como es normal y después de tantos años, Alberto Pérez Freijomil conoce las dolencias y los males de sus paisanos de O Hío en donde el doctor es querido y respetado por su atención sanitaria y el trato tan humano y cercano con sus pacientes.
La baja de Freijomil había causado un gran vacío en la asistencia sanitaria en la parroquia, con más repercusión, quizás, en las personas de más edad, acostumbradas a recibir la atención de una persona que le llamaba por su nombre nada más entrar por la puerta, sin necesidad de leer historiales médicos y que sabe compartir las preocupaciones. Él mismo ha estado estos seis meses de baja a causa de una enfermedad que está superando y se ha tenido que sentar, en la consulta, al otro lado de donde lo hace desde hace 30 años, en el del paciente .
