El BNG de Lalín llevará al primer pleno ordinario que se celebre una moción para solicitar a la Xunta de Galicia la creación de una línea de ayudas enfocada a paliar las consecuencias del estado de alarma en el comercio y la actividad empresarial en general. Se trata de "facilitar la adaptación a los nuevos tiempos que impone el Gobierno del Estado", expone su portavoz, Francisco Vilariño.

La formación nacionalista entiende que el proceso de desescalada "va para varios meses" y que la adaptación de los distintos negocios para poder operar supondrá un coste económico que no están en condiciones de asumir. "Muchos ya han quedado muy tocados después de mes y medio de cierre; no se les puede cargar más", señala el concejal, que vaticina "meses muy difíciles", no solo para el comercio y la hostelería propiamente dichos, sino también para otro tipo de establecimientos. "Que la Xunta deje de ponerse de perfil y abra líneas de financiación para mamparas, sinaléctica de distancias, venta on line, mascarillas, soluciones hidroalcohólicas...", demanda Vilariño. Insiste en que habilitar o no estas ayudas marcará en muchos casos "la diferencia entre seguir abiertos o echar el cierre".