"Que vivan tódolos presentes, volo digo de corazón, que viva San Tirso de Manduas, e que viva a nosa unión". Con esta copla remató ayer el Alto dos Xenerais de A Bandeira uno de sus participantes, Antonio Brey, que precisamente se enfrentaba a su hija Carmen en una batalla dialéctica en la que ella coordinaba las tropas de A Bandeira para invadir Manduas, los territorios que él defendía. La localidad se volcó, un año más, con su Entroido, que contó también con un Alto Infantil, puesto que los alumnos del CEIP Ramón de Valenzuela llevan varios años ensayando de la mano del profesor José Casal, a quien se mencionó en varias ocasiones durante los ¡Vivas! del desfile.
Casal no fue el único a quien A Bandeira quiso agradecer su compromiso con el Entroido da Ulla. Brey, cuya mujer es de Bergantiños, improvisó una regueifa en la que agradeció la colaboración, durante años, de Alfonso Gómez, vecino de Dornelas, en la preparación del Entroido de A Bandeira. A Gómez se le entregó una placa como recuerdo. Hubo también mención para otros dos vecinos, Sueiro (de Lamela) y Servando (de A Bandeira, ya fallecido).
A Bandeira sabe mirar al pasado para encarar su Entroido con fuerza hacia el futuro. Y los más jóvenes saben combinar muy bien la vestimenta de Xenerais con apuestas muy originales. Disfraces de 101 dálmatas, de indicios, de reggaetoneros, de coronavirus... todos ellos lucieron en el desfile para competir por los premios que se entregaron durante el baile nocturno en el pabellón.
Ya en el casco urbano de Silleda, que hoy celebra su desfile, ayer por la noche la Banda de Música Municipal ofreció un concierto acompañada por Suso Vaamonde. A su término comenzó una cena-baile de disfraces, amenizada por el dúo Media Luna y que se prolongó hasta la madrugada.
El resto de la comarca no permanece, ni mucho menos, ajena a don Carnal. En Vila de Cruces, la Fundación A Solaina Paco Lareo inauguró una exposición de Carnaval a base de creaciones de los asistentes al cursillo de pintura que imparte Óscar Vilar. Por su parte, la Fundación Eira da Xoana, en Ramil (Agolada), acogió la tradicional Festa das Lupercais, que cumple ya su cuarto año. Durante la comida los asistentes escogieron a la Raíña Lupa 2020.
