Los cultivos fueron otro de los afectados por el granizo en la comarca dezana. Tal y como informa Román Santalla, responsable de ganadería de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), recibió ayer múltiples quejas y indica que las zonas más afectadas fueron Goiás, Sello, Bermés y Santisos. "Huertos machacados, invernaderos perforados, tejados de alpendres y granjas con agujeros y fincas de maíz muy dañadas", afirma. Esto provocará importantes pérdidas para los afectados "porque las cosechas creo que solo el 5% están aseguradas, por los seguros son caros y están poco apoyados por parte de la Consellería", subraya.

Reclamo de ayudas

Ante esto, Santalla reclama al Concello de Lalín que realice una estimación de los daños y que apoye a los afectados y que se pidan ayudas a la Xunta de Galicia. "La Xunta tiene mecanismos de ayudas ante fenómenos meteorológicos graves, bien a través de subvenciones directas o de préstamos, pero a la gente no se puede dejar sola", recalca. Recuerda la situación que vivió hace unos cuatro años la localidad lucense de Sober cuando una granizada a mediados de agosto destruyó los viñedos, provocando la pérdida por completo de la producción de uva y señala que en esa ocasión, la Xunta destinó ayudas para reparar, en cierta medida, esos daños.

Los frutales también son otros de los perjudicados de la tormenta del jueves. Ayer se podían ver cantidad de frutos, como manzanas o nueces, todavía sin madurar, que aparecían todas destrozas en el suelo, en zonas del casco urbano de Lalín o en la parroquia lalinense de Goiás, por ejemplo.