La polémica que está suscitando la obra de reforma de la Praza da Constitución -enmarcada en el proyecto de reurbanización y ampliación de la alameda municipal-, parece todavía lejos de disiparse. El BNG estradense pidió ayer públicamente los informes técnicos que justifiquen la tala de árboles realizada a finales de semana pasada en estos jardines. "Los vecinos tenemos que saber en qué se basó la empresa adjudicataria para cortar los árboles centenarios de la alameda y, por tanto, desde el BNG queremos ver los informes técnicos que justifican, según el alcalde, la tala de árboles de gran porte", sostuvo el portavoz nacionalista, Xosé Magariños. Esta formación registró formalmente la petición de este informe.

El edil explicó que el regidor utilizó las redes sociales para justificar esta acción. "Dice el alcalde que uno de los árboles de gran altura suponía un peligro pero, ¿para quién?", cuestiona, para seguidamente preguntarse si podría ser para facilitar el trabajo y ahorrar costes. "Ese árbol llevaba décadas de pie soportando vendavales muy fuertes. Si hasta ahora no suponía un peligro, está claro que lo del peligro es un invento del alcalde para justificar lo injustificable", sostuvo el líder del Bloque.

En otro orden de cosas, Magariños considera que si el alcalde tiene que salir ahora a dar explicaciones e porque no se dieron cuando se habló de ampliar la alameda". "Viene a confirmar lo que desde el BNG siempre dijimos, que es que es un proyecto que se hizo sin participación pública. Esperemos que ahora el resto de las fuerzas de la oposición den un paso al frente y abandonen el paripé de la Edusi y no sigan haciéndole el coro al PP", declaró.

Aclaraciones de López

Por su parte, el alcalde también realizó ayer en un comunicado diversas aclaraciones -la mayoría ya avanzadas por esta Redacción- en relación a las obras que están generando estos días un profundo debate social. El regidor situó el origen de las críticas en la actitud de la oposición, "en un intento de reengancharse a la política tres años y medio después del inicio de la legislatura y dar así la sensación de estar haciendo algo a cuatro meses de las elecciones". Tras calificar esta postura como "política mediocre", el dirigente no dudó en compararla con la reacción de un estudiante que intenta hacer todo el trabajo del curso antes de los exámenes finales.

López defendió que la actuación que está generando estos días múltiples reacciones ciudadanas ha de entenderse como un proyecto integral, abarcando Praza da Constitución, jardines y zona de ampliación "como un espacio único". "No se trata de acometer la obra por zonas o a modo de retales", incidió.

Recordó que el proyecto supondrá la creación de gran plaza pública con una rasante única hasta el final del terreno, creando un espacio más diáfano y procurando una sensación de amplitud. Con esta intervención la plaza que se abre a los pies del consistorio aumentará "hasta los 2.600 metros cuadrados".

Como explicó a FARO el martes, López Campos reiteró ayer que separar las losas de piedra actuales sin romperlas "resultaba imposible" debido a su grosor de cuatro centímetros. "Por lo que se decidió levantarlas y colocar un nuevo pavimento dado el escaso valor patrimonial de esas losas, no así con la pérgola y el vallado, elementos que serán recuperados", explican desde el gobierno.

El ejecutivo defiende asimismo que con el nuevo pavimento se conseguirá, además, el pretendido aspecto homogéneo proyectado para el conjunto de la alameda.

López no quiso olvidarse de recordar que cuando se pusieron en marcha los proyectos de A Baiuca, el Plan Xeral o la Edusi "también fueron duramente criticados desde la oposición, que solo se limita a criticar todos los proyectos presentados por el equipo de gobierno".