"Este tema nos urge", reconoció recientemente el alcalde de A Estrada. El dirigente local asumió hace unas semanas que la tramitación de este primer desoble hacia el rural estradense de la traída del Umia se demoró más allá de lo inicialmente esperado, ya que las previsiones municipales pasaban por haber podido emprender las obras para esta ramificación el pasado verano.

La insistencia del Concello en esta cuestión emana de los problemas que el abastecimiento de agua genera para algunas viviendas de Tabeirós y Nigoi. Según se indicó, en la primera de estas dos parroquias algunas casas llegaron a quedarse sin suministro en alguna que otra ocasión. Estos hogares se abastecen principalmente con pozos y manantiales.

Aunque se estrenó como red de abastecimiento únicamente al casco urbano de A Estrada, la traída de agua del Umia tiene capacidad para servir a 15.000 ciudadanos. Es por ello que desde el primer momento se planteó la posibilidad de realizar ramales que lleven esta agua a los puntos del rural por los que atraviesa esta conducción. El Concello anunció recientemente su intención de afrontar los problemas de suministro que padecen zonas próximas al casco urbano también a través de una extensión de esta red. Es el caso de zonas de Lagartóns y Matalobos próximas a la villa.