El Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas acaba de hacer públicos los balances del primer trimestre del año sobre el período medio de pago a proveedores y la práctica totalidad de los concellos de Deza y Tabeirós-Montes ha hecho los deberes impuestos por otra estricta normativa del departamento de Cristóbal Montoro. Si al cierre del año pasado A Estrada y Dozón rebasaban el período máximo de 30 días establecido en la legislación, con promedios de 41,40 y 114 jornadas, ahora solamente Agolada -que en los últimos años solía incumplir esta exigencia- debe mejorar sus balances una vez que la liquidación de sus facturas está en una media de 30,55 días.
Un real decreto aprobado el pasado mes de diciembre, que estableció un nuevo sistema para controlar el abono a los proveedores por parte de todas las administraciones, no solo la municipal. Hasta marzo, el máximo legal estaba fijado en 30 días, pero ese plazo comenzaba a contar un mes después de que una factura fuese registrada por la administración en cuestión. A partir de abril, el tope legal se mantiene en 30 días, pero se suprime ese período de gracia, por lo que en la realidad se pasa de un máximo de 60 días a 30. Lo que sí se mantienen son los cálculos en caso negativos; es decir, hay municipios que son capaces de paga sus facturas antes de que comience a contar el citado período de un mes de tope. Cabe recordar que siempre estamos hablando de los registros divulgados por el Hacienda del pasado mes de marzo. En esta situación, en las comarcas, están los concellos de Forcarei, Silleda y Vila de Cruces. En el primer caso el período medio de pago es de -14,13 días; siendo así la administración municipal de la zona que antes abona sus obligaciones con los proveedores. Vila de Cruces lo hace 7,23 días antes y Silleda; 6,61. A Estrada es el cuarto concello de las comarcas que más agilidad se da en atender sus compromisos y el llamado Período Medio de Pago a Proveedores (PMPP) es de 0,79 días desde la factura es remitida por su cliente. Lalín y Rodeiro muestran situaciones semejantes, con promedios de 6,7 y 5,4 días. Ya mencionado el caso de Agolada, el Concello d Dozón liquida sus compromisos con proveedores en una media de 23 días, mientras que Cerdedo-Cotobade baja hasta los 5,4.
Dentro del cálculo que realiza periódicamente el ministerio se muestran otros datos importantes, como la ratio de las operaciones pagadas por cada uno de las administraciones públicas, así como los importes de las facturas liquidadas y las pendientes. De este modo, en marzo los nueve concellos de las dos comarcas abonaron un total de 6.189.891 euros y tienen pendiente de satisfacer servicios prestados por algo casi 2,58 millones. Lalín cerró pagos por valor de 1,54 millones el tercer mes del presente año y tiene en su debe otros que suman 667.823 euros. El desglose en A Estrada es de 1,21 millones y 614.613 euros y en Silleda, de 1,4 millones y 119.830 euros respectivamente. Más ajustados son los datos de Vila de Cruces, con 380.775 euros en pagos y 268.546 pendientes. En Rodeiro son 279.431 y 122.900 euros y 277.519 y 23.005 en Agolada. Dozón abonó facturas por 120.526 euros y adeuda otras que suman 60.346. En Forcarei son 315.036 y 47.948 euros respectivamente y 603.419 y 654.373 en el caso de Cerdedo-Cotobade.
