La huelga de los examinadores quiere forzar a la Dirección General de Tráfico (DGT) a cumplir las promesas que quedaron plasmadas en un acuerdo en 2015, tales como la subida del complemento específico en 240 euros brutos al mes. Exigen, también, tener una categoría propia dentro de la escala de funcionarios. Sin embargo, en el último encuentro entre sindicatos y DGT, ésta mostró su disponibilidad tan solo a activar dicha escala propia y aumentar la plantilla de personal formando con un curso de tres meses a militares de tropa y marinería.