"Yo no me merezco nada de esto, si prácticamente no he hecho nada para que me den este premio". Con estas palabras, y todavía sin recuperarse de la "sorpresa" recibida, valoraba José Carlos García Vázquez su distinción como Lalinense do Ano. Su dilatada trayectoria al frente de la Asociación Veciñal San Amaro y su defensa de los recursos patrimoniales de su parroquia de Donramiro le han valido el reconocimiento. "Yo estoy ahí, pero son los vecinos los que colaboran, uno solo nunca hace nada, ni para bien ni para mal", añade el galardonado, que se considera "uno más" de su comunidad. En todo caso, sostiene que para él es "un honor" verse distinguido de tal forma y se muestra "muy agradecido" por ello. "Pero no sé hasta qué punto me lo merezco", reitera.