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Las campañas de pulpo y nécora arrancan pendientes del resurgir de la hostelería

Las perspectivas son moderadamente optimistas en cuanto a capturas pero se teme una caída importante de precios ante la falta de demanda del sector de la restauración

Una pasada subasta de nécora en la lonja de O Grove. // Muñiz

Las flotas dedicadas a la captura de nécora y pulpo regresan y se enfrentan, a partir de hoy, a una campaña cargada de incertidumbre y con la preocupación de si habrá suficiente demanda para sus recursos. Las dos flotas miran con preocupación lo que está ocurriendo con un sector básico para su trabajo, el de la restauración, que se lleva gran parte de la producción y que garantiza las ventas a precios adecuados. Esta circunstancia preocupa en dos de los muelles donde más se descargan estos recursos, el de O Grove y el de Cambados.

Antonio Otero, patrón mayor de O Grove, reconocía ayer que "no nos preocupa tanto como otros años la cantidad de capturas, en la que somos moderadamente optimistas, sino que el pensamiento está en si tendremos la suficiente demanda para su venta, sobre todo si la restauración no funciona al 100%, que es lo que nos tememos por los efectos del coronavirus".

Si no existe demanda, la caída de precios es inevitable para ambos sectores y "podemos ver como una nécora de gran calidad que, el pasado año, podía rondar entre los 40 y 50 euros el kilo pasa a costar tan solo 20; esa circunstancia sería un durísimo golpe para toda la flota que se dedica a la captura de esta especie".

Circunstancias que marcaban el inicio de otras campañas, como la meteorología o el estado del recurso, aunque siguen preocupando, han pasado a un segundo plano por los efectos que ha provocado la pandemia del coronavirus.

Ruperto Costa, patrón mayor de Cambados, expresa sensaciones muy similares a las de su homólogo de O Grove. "La campaña estará marcada por el funcionamiento de la hostelería, si la restauración funciona habrá ventas que pueden permitir salvar la campaña, incluso en la nécora, donde las perspectivas del recurso no parecen precisamente muy halagüeñas; si no funciona la hostelería, el sector puede sufrir un severo revés". Costa insiste en que "el principal handicap que tenemos que afrontar en esta campaña pasa por la restauración y, en estos momentos, está todo rodeado de incertidumbre y desconocemos que puede pasar".

Tanto Cambados como O Grove cuentan con una treintena de embarcaciones dedicadas a la captura de estas especies que comenzarán a largar sus artes de pesca en la jornada de hoy.

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