La edil de Medio Ambiente de O Grove, Ángeles Domínguez, explica que "en A Lanzada había una ingente cantidad de algas que ya intentamos retirar el viernes, pero era un volumen tan alto que no bastaba con la maquinaria municipal y había que seguir trabajando".

Esgrime que tras recibir los permisos de Medio Ambiente "inmediatamente contratamos una retroexcavadora y regresamos a la playa -ayer- para abrir una gran zanja en la que enterrar las algas a la mayor profundidad posible". También aclara que "si esta vez se optó por eliminarlas, en lugar de dejarlas en la arena, fue porque era una cantidad exagerada y no se trata del mismo tipo de algas que protegen y alimentan al chorlitejo".

Al tiempo que lamentan las molestias causadas y explican que esta obra estuvo plenamente justificada, desde el gobierno grovense confirman que "no dio tiempo a actuar antes de que llegara los bañistas porque había una cantidad enorme de algas y los usuarios acudieron en masa y desde muy temprano a la playa, de ahí que a las once de la mañana ya hubiera atascos en la vía rápida".

Domínguez termina diciendo que se informó de esta actuación a los responsables políticos de Sanxenxo y que la excavadora accedió a la arena por ese municipio porque por el otro lado del arenal le resultaba imposible, ya que hay nidos de chorlitejo con polluelos.