Los pasos a nivel, con o sin barreras, se antojan un peligro para aquellos ciudadanos que, a pie o en cualquier tipo de vehículo, se ven obligados a cruzar las vías del tren. Prueba de ello son las muertes acaecidas en estos lugares en diferentes puntos del Ullán, la más reciente el lunes pasado, cuando perdió la vida José López Castiñeiras, nacido en la parroquia catoirense de Oeste hace 66 años pero residente en Valga.

Y es solo un ejemplo, pues no hay que olvidar que en abril de 2007 perdieron la vida en la parroquia valguesa de Campaña Jesús Martínez Senín, de 54 años, su hijo Roberto Martínez Ríos, de 28, y su socio en una empresa de albañilería, José García Bejo, de 48 años, cuando intentaban cruzar la vía en su coche.

En el momento en que se encontraban sobre la vía fueron arrollados pir el tren, que arrastró al turismo unos ochocientos metros.

De ahí la importancia de la supresión de los pasos a nivel, como ya se hizo en los últimos años en diferentes puntos del Ullán, especialmente en el Concello de Valga, donde los vecinos llegaron a organizar concentraciones de protesta para exigir este tipo de medidas.

Ahora, con más retraso del que sería deseable, se ejecuta la supresión de dos pasos a nivel en el Concello de Catoira, uno a la altura de la vieja fábrica de Cedonosa y el otro en Abalo.

Es una actuación aprobada y reivindicada por el pleno de la Corporación hace más de una década, concretamente en 2008. Dos años después se anunciaba la adjudicación de las obras para lograr la supresión del paso existente en el lugar de Cores, en la parroquia de Abalo, por cuya eliminación ya peleaba el regidor una década antes, y del paso existente junto a la fábrica de Cedonosa.

Ha pasado una década desde aquello, cuando además se explicaba que la obra iba a propiciar la creación de una calle que permitiría ensanchar viales existentes y mejoraría el espacio comprendido entre la estación y el paso elevado que conduce a las Torres do Oeste, para desde allí girar de nuevo en paralelo a la vía, pero por el otro margen, hasta el entorno de la piscina fluvial. Estaba previsto habilitar un vial de 6 metros de ancho, con cunetas transitables de 0,5 metros y acera de 1,5 de ancho.

Pues bien, esta misma semana el alcalde visitó las obras que se acometen desde hace unos días en el Paseo de Xelmírez para eliminar los pasos a nivel.

Explica el primer edil, Alberto García, que la empresa Viasfalt es la adjudicataria de este proyecto "diseñado por el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) que cuenta con un presupuesto de casi 700.000 euros".

"Las obras comenzaron antes del trágico accidente ocurrido el pasado lunes en otro paso a nivel de Catoira y que costó la vida a una persona", resalta García antes de detallar que "la eliminación del paso de Cedonosa supone que el tráfico sea desviado por el Paseo de Xelmírez, para lo cual esta vía que permite acceder a las instalaciones náuticas y empresas de la zona va a ser urbanizada".Mejoras viarias

Abundando en lo que explicaba ya en 2010, el alcalde asevera que el proyecto en cuestión "contempla la ampliación de la carretera que pasa sobre la vía y del paseo, creando una calle de siete metros de ancho con dos carriles".

Asimismo, "está previsto construir aceras por uno de los márgenes y soterrar las líneas de iluminación y telefonía para evitar la instalación de postes", al tiempo que se colocará "la instalación de gas y alcantarillado".

El propio Alberto García lamenta que "la ejecución de este proyecto aprobado en un pleno del Concello en 2008 se demoró varios años, a pesar de las numerosas gestiones realizadas durante este tiempo en Madrid con los representantes de ADIF".