El viento arranca parte de un tejado en Ponte Caldelas: “Fue como una especie de remolino”

Las piezas, de grandes dimensiones, cortaron al tráfico una calle y causaron daños en un coche aparcado, pero no hubo heridos

Piezas del tejado que se desplomaron en Ponte Caldelas, dañando un coche.

Piezas del tejado que se desplomaron en Ponte Caldelas, dañando un coche. / FdV

N. D.

“Escuchamos un estruendo muy grande y al asomarnos a la ventana vimos este desastre”. Alrededor de las 23.00 horas del pasado jueves, los vecinos de un edificio de Ponte Caldelas se llevaron un gran susto después de que una fuerte y repentina racha de viento arrancara parte de un tejado del inmueble. “Fue como una especie de remolino”, comentaban ayer algunos de los testigos, que se congratulan de que el incidente no provocara heridos.

Fueron casi una decena de piezas de grandes dimensiones las que se desplomaron sobre la vía pública y cortaron el tráfico en el inicio de la carretera de Laxoso, en la salida desde el casco urbano de Ponte Caldelas, muy cerca de la plaza de Cotobade, según informó el alcalde, Andrés Díaz.

Aunque no hubo heridos, si se produjeron desperfectos ya que algunas piezas del tejado cayeron sobre un coche aparcado en la zona.

El edificio afectado, de cuatro plantas, tiene unos 40 años de antigüedad, pero la cubierta se reparó hace un lustro, por lo que era prácticamente nueva. Sin embargo, no fue capaz de resistir el fuerte empuje del viento, que a esas horas arreciaba en varias zonas de la comarca, con rachas que rondaron los 110 kilómetros por hora, según las mediciones de Meteogalicia en la estación de Fornelos de Montes.

El 112 explicó que la estructura cayó en la carretera PO-234, encima de un coche que estaba aparcado y en la propia vía, en el punto kilométrico 0,200. Confirmó que ninguna persona resultó herida y para garantizar las condiciones de seguridad, desde el 112 se solicitó la intervención de la Guardia Civil de Tráfico y del servicio de mantenimiento de la carretera afectada. También acudieron los Bomberos de O Morrazo, que evaluaron los daños.

Fueron varias las placas que volaron desde lo alto del inmueble. Unas se desplomaron en la parte delantera, hacia la calle, y otras hacia un lado, en una finca colindante. “Sentimos un ruido muy fuerte y al asomarnos vimos este desastre. A esa hora soplaba mucho el viento fue un susto muy grande, aunque afortunadamente no pasó nada”, apuntaba una de las vecinas de la zona.

Otro inquilino daba una versión muy parecida y comentó que “desde hace unos días hay mucho viento, aunque (en el incidente de ayer) fue una ráfaga impresionante. Menos mal que no pasaba nadie a esa hora”, aunque existen algunos negocios y establecimientos en la zona”. Vecinos de Ponte Caldelas apuntaron también que “la noche fue horrible” por el fuerte viento, un fenómeno que se repitió en la jornada de ayer, con rachas que llegaron a los 90 kilómetros por hora en el alto de Xesteiras (Cuntis).

Además de estas placas de la cubierta del inmueble, el viento provocó otros desperfectos, como la caída de un árbol de grandes dimensiones sobre el puente del río Verdugo, en la PO-235, que también quedó temporalmente cortada al tráfico. Fueron las brigadas municipales las que despejaron el vial.