El delegado territorial de la Xunta en Pontevedra, Luis López, presentó oficialmente en la mañana de este viernes su candidatura a la presidencia del Partido Popular de Pontevedra, una vez que la junta directiva del partido decidió convocar un congreso para la sucesión de Alfonso Rueda al frente de los populares en la provincia.
En las próximas semanas realizará una campaña interna encaminada a conseguir 75 avales para su candidatura. Se trata de una cifra exigua que, recordó, facilita que “cualquier militante se presente”, si bien no se esperan sorpresas y que aparezcan contrincantes frente al que se considera el aspirante de consenso. De hecho, Luis López reconoció haber recibido el apoyo de “muchos compañeros”, lo que le habría animado definitivamente a tomar, a mediodía de ayer, jueves, “una decisión rápida” y aspirar a la presidencia provincial.
Se mostró dispuesto a “encabezar un proyecto fuerte, de todos”, con la idea de reforzar las juntas municipales “con la mirada puesta en las próximas elecciones municipales, en las que se buscará “trasladar los buenos resultados de las autonómicas” a los concellos de la provincia.
El principal objetivo es trasladar a los concellos los buenos resultados de las autonómicas. Para ello buscará reforzar las juntas municipales con la mirada puesta en los comicios de 2023
Se tata del principal objetivo de su candidatura. El “reto mínimo”, señaló, es que en las próximas municipales se superen las 24 alcaldías que ostenta actualmente el PP en Pontevedra.
El segundo reto es “contribuir al cambio necesario en España” de la mano de Alberto Núñez Feijóo y, asimismo, “revalidar la quinta mayoría absoluta en Galicia en 2024 con Alfonso Rueda”.
Luis López incidió en que “no tengo más vocación que ser útil al partido y contar con cada alcalde, portavoz y militante”. Ex alcalde de Rodeiro, se declaró “municipalista convencido” y defensor de una política de proximidad y de escucha a las personas.
Tras seis años de “trabajo excepcional”, afirmó, de Alfonso Rueda, avanzó que no intentará imitar a su predecesor “porque es imposible”, pero sí que hará “un trabajo continuador, que no continuista”, en el que “habrá matices diferentes”
Tras seis años de “trabajo excepcional”, afirmó, de Alfonso Rueda al frente del partido en una provincia que “históricamente es compleja para el PP”, avanzó que no intentará imitar a su predecesor “porque es imposible”, pero sí que hará “un trabajo continuador, que no continuista”, en el que “habrá matices diferentes”.
Parafraseando a Alfonso Rueda en relación a Núñez Feijóo, explicó que “ya que no puedo sustituirlo, voy a intentar mejorarlo”.
En caso de resultar elegido en el congreso de los populares previsto para el 9 de julio, compatibilizará la presidencia del PP con su cargo de delegado territorial de la Xunta. “No me mueve una ambición política o personal de calado”, señaló antes de declararse “a disposición del partido. Nunca aspiré a la presidencia pero no reúso la responsabilidad si es buena para el Partido Popular”.
En caso de resultar elegido en el congreso de los populares previsto para el 9 de julio, compatibilizará la presidencia del PP con su cargo de delegado territorial de la Xunta
Empezó a valorar “de modo tímido y personal” el presentar su candidatura desde que el comité de dirección decidió por mayoría proponer un congreso extraordinario como la mejor solución para la sucesión.
La decisión se fundamentó finalmente en “dos vertientes”, la primera de ellas que “creo que puedo cumplir los requisitos porque por mi cargo orgánico como número 2 y como cargo institucional como delegado territorial tengo conocimiento de la provincia” y contacto regular con los 61 concellos. A ello se suman “los compañeros que me animaron en las últimas horas”, a los que agradeció un apoyo que “llena de responsabilidad y contribuyó enormemente a presentar mi candidatura”, destacó.
