La Guardia Civil ha detenido en el municipio de Cerdedo-Cotobade a un delincuente que la propia Comandancia califica de "peligroso y escurridizo" que está especializado en los robos de coches. Se trata de un varón de 42 años, que cuenta con un amplio historial de antecedentes por hechos violentos.

El instituto armado apunta que es una persona itinerante, sin domicilio fijo en esta provincia, "que no dudaba en utilizar métodos o procedimientos violentos, tanto para conseguir sus objetivos, como para evadirse de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad cuando proceden a su detención". De hecho, en una de sus actuaciones se apoderó de un coche con su propietaria y dos menores en su interior, y en otra ocasión logró huir de los agentes en la parroquia pontevedresa de Tomeza rociando los ojos de uno de ellos con un spray.

Las investigaciones que pusieron fin a la encadenada secuencia de hechos delictivos que protagonizó durante los últimos meses, no solo en Pontevedra, sino también en varias provincias del territorio nacional, se iniciaron a finales del pasado mes de marzo cuando se tiene conocimiento del robo de un vehículo municipal, un Renault-Clio propiedad del Concello de Nigrán.

Pocos días después, en las inmediaciones del lugar donde sustrajo este Renault-Clio, se recuperó un Audi-A4 que había sido sustraído unos días antes en Ávila. En el interior de este vehículo, el Área de Investigación del Puesto Principal de la Guardia Civil de Baiona-Nigrán, que se hizo cargo de las diligencias, encontró huellas dactilares y efectos personales de la misma persona.

Siguiendo la línea de investigación del Renault-Clio se pudo constatar que el 8 de abril lo había intentado vender en Sevilla. La transacción no llegó a realizarse porque el comprador se enteró de que el vehículo figuraba como sustraído, circunstancia que le obligó a darse a la fuga cuando la persona que se lo vendía, el verse descubierto, pretendió agredirlo con un cuchillo de considerables dimensiones.

Ante estas circunstancias se produce a continuación uno de los incidentes más graves que protagoniza esta persona. Al verse descubierto y temiendo la llegada de la Policía, se introduce en un vehículo que se encontraba parado y amenaza a la conductora con un cuchillo para que reinicie la marcha. En los asientos traseros iban dos menores de cuatro y seis años.

En un momento determinado de la fuga, le dice a la conductora que pare para dejar a los niños en la calle y que vuelva a subir para ayudarlo a salir de la zona. En este instante se vio sorprendido con la llegada de una dotación de la Policía Nacional y pudo emprender la huida el solo en el turismo, sin que lograsen alcanzarlo. Posteriormente efectuaría un repostaje en una gasolinera de Alcalá de Guadaíra, de donde se marchó sin pagar.

El siguiente episodio delictivo lo protagoniza el 18 de abril en Baiona, a donde llegó conduciendo el vehículo con el que se había fugado de Sevilla, un turismo Dacia de color blanco. En esta localidad se le atribuye un robo en la vivienda de la madre de su expareja, donde se había alojado durante unos días. La mayor parte de los objetos sustraídos, entre los que figura una importante colección libros de ediciones limitadas, relojes, plumas y joyas, fueron recuperados en el domicilio de un familiar en la ciudad de Pontevedra.

Una semana después, el equipo de investigación intercepta un vehículo sospechoso en la parroquia pontevedresa de Tomeza, en el que viajaba esta persona. Para tratar de huir, roció con un spray los ojos de uno de los agentes cuando trataba de identificarlo, lo que posibilitó que se diese a la fuga campo a través.

En el interior de este coche se encontró un casco de motorista y el contrato de compraventa de una motocicleta suscrito con una identidad falsa en Salamanca, donde se recuperó el turismo de la marca Dacia que había sustraído en Sevilla.

Finalmente el día 13 de este mes en Cerdedo-Cotobade (Pontevedra), no sin antes haber protagonizado otra fuga el día 30 de abril en Ourense, donde estuvo a punto de atropellar a los agentes que pretendían interceptarlo cuando pilotaba una motocicleta de alta cilindrada.

La detención se produjo, en esta ocasión sin ofrecer resistencia, cuando fue sorprendido por el equipo de investigación tomando unas consumiciones en la terraza de un restaurante. En el momento del arresto portaba en un bolsillo un spray pimienta y un reloj de los sustraídos en la casa de Baiona. También llevada en su cartera los permisos de conducir y las tarjetas sanitarias de dos personas, con los que solía identificarse.

En las proximidades tenía estacionado un turismo, Volkswagen-Golf, que había robado días antes en Ourense. El vehículo llevaba unas placas de matrícula que habían sido sustraídas de un Renault-Laguna en Portugal. En la guantera del vehículo portaba también un cuchillo de considerables dimensiones.

Además de los delitos que se le atribuyen por los casos relatados (robo con fuerza en una vivienda, detención ilegal, atentado, resistencia y desobediencia a los agentes de la autoridad, usurpación de estado civil, amenazas, falsificación de documento público y apropiación indebida) también se le atribuye la presunta autoría de doce delitos de robo de vehículos o en el interior de los mismos, en A Estrada, Nigrán, la ciudad de Pontevedra, Ourense, Sevilla, Ávila, Cuenca, Salamanca y Portugal.

El detenido fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Pontevedra, que decretó su ingreso en la prisión de A Lama.