Una concentración de trabajadores de Ence, con la secretaria general de CC OO en Galicia a la cabeza, Amelia Pérez, esperaba esta mañana ante las puertas de la Audiencia Provincial al resultado del juicio contra un empleado de la pastera a quien la Fiscalía solicitaba una pena de un año de cárcel por atentado a la autoridad, por los insultos a los concejales del gobierno local y las patadas al coche del alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores, tras un encierro en las dependencias municipales de Michelena en mayo del pasado año.

Finalmente, no fue necesario juicio y el trabajador, Ramiro Cerdeira salía entre aplausos de la Audiencia para comunicar a sus compañeros que había llegado a un acuerdo con la Fiscalía para eliminar de la acusación el delito de atentado y rebajarlo a un delito de leve de falta de respeto a la autoridad por la que aceptó una multa de 180 euros que zanjó en ese mismo momento. Visiblemente emocionado por el apoyo de sus compañeros de la fábrica, Cerdeira dejó claro que "vamos a seguir defendiendo nuestros puestos de trabajo y el pan de nuestros hijos". Considera que este acuerdo con la Fiscalía demuestra que "no soy ningún delincuente", "no le hice mal a nadie" y que fueron unos hechos enmarcados "en el conflicto laboral que tenemos" por la continuidad "de esta fábrica que nos da la vida a todos los que estamos aquí y a mucha más gente".

"vamos a seguir defendiendo nuestros puestos de trabajo y el pan de nuestros hijos", afirmó al salir

Ahora dice que queda tranquilo, sin la amenaza de la petición de un año de cárcel que pesaba sobre y él y tras zanjar la multa. Los miembros de Comisiones Obreras no ahorraron en críticas al alcalde de Pontevedra. La pancarta que sostenían rezaba: "Non a represión de Lores contra @s traballador@s de Ence". Amelia Pérez aseguró que "es lamentable que tengamos que estar aquí hoy por defender los puestos de los trabajadores" y que "una autoridad política monte este numerito con estas denuncias" de tal forma que "parece que molesta que defendamos nuestros puestos de trabajo". Ana Cedeira, presidenta del comité de oficinas de Ence, también fue crítica con el alcalde: "Estamos sufriendo ataques continuamente por parte del ayuntamiento y del Gobierno central, pero sobre todo del Concello, insultándonos, llamándonos Enceborroka, y la gota que ha colmado el vaso es que intentasen meter en la cárcel a un delegado del comité de empresa en la cárcel", afirmó. "Vamos a seguir saliendo a la calle y defendiendo nuestros puestos de trabajo", finalizó.