El BNG visitó ayer las instalaciones del centro de salud de Baltar para denunciar la “situación límite” que viven sus profesionales sanitarios, con jornadas de cerca de cien pacientes por médico, ante “el colapso de la Atención Primaria y la falta de personal para cubrir las bajas o vacaciones de los facultativos”, explicó la diputada en el Parlamento de Galicia, Marga Prado.
Para la representante del BNG esta realidad “es consecuencia directa de los continuos recortes que durante los últimos doce años ha vivido la sanidad pública”. “Ya antes de la pandemia era imposible atender a toda la demanda que se concentraba en Atención Primaria, pero es que con el coronavirus los profesionales han visto incrementadas sus prestaciones. En concellos muy masificados, como es el caso de Sanxenxo, a día de hoy no existe un refuerzo de personal durante el verano que permita hacer frente al aumento de pacientes derivados del turismo”, explicó.
“En Sanxenxo de diez médicos que deberían estar trabajando solo hay tres. Faltan dos personas en enfermería y sólo hay dos auxiliares”, denunció Prado, que exige al Ejecutivo autonómico “la incorporación del refuerzo de cuatro enfermeras y dos médicos ”, que solían contratarse durante la campaña estival.
Además, la diputada se refirió a la gestión de la pandemia llevada a cabo por la Xunta de Galicia: “El Partido Popular eliminó el rastreo de positivos por COVID-19, sólo se está avisando a contactos directos y el rastreo acaba pasando a los médicos de Atención Primaria”.
De esta manera, Prado considera que la Xunta “ignora la imposibilidad de que los facultativos atiendan a sus pacientes crónicos, los habituales y los desplazados, realicen la vacunación y, además, tengan la responsabilidad de realizar el seguimiento de los caos de coronavirus”.
Entre las medidas propuestas por el BNG para hacer frente a la presión sanitaria están “el cambio en las políticas de contratación que motiven a los facultativos a trabajar en el Servicio Galego de Saúde, el aumento de la oferta de profesionales con la integración de psicólogos clínicos, podólogos o trabajadores sociales que pueden aliviar el colapso sanitario, y la incorporación de un equipo de rastreadores para evitar la multiplicación exponencial de contagios”.
Por su parte, la portavoz del grupo municipal nacionalista, Sandra Fernández Agraso, alertó de “la preocupante situación sanitaria del Centro de Saúde de Baltar” y tildó de “auténtica chapuza” la gestión llevada a cabo por el alcalde Telmo Martín, “ya que está intentando desmantelar todo lo que es público”.
Fernández Agraso indicó que “no es cierto que porque todavía haya camas UCI libres no suceda nada. Creemos que hay que ser responsables y el alcalde debe salir públicamente a solicitar el uso continuado de las mascarillas en las calles más transitadas de Sanxenxo”.
