La tercera ola de COVID-19 está rompiendo todos los registros históricos del virus en Galicia. Si la semana pasada la comunidad elevó su curva de casos activos hasta cotas desconocidas, en las últimas horas tres áreas sanitarias han roto sus techos: A Coruña, Santiago y Ourense. Pontevedra todavía no ha llegado a ese extremo, ya que este lunes notifica 1.088 casos activos (+105), aunque se aproxima alarmantemente a los 1.277 datados el 14 de noviembre. Otro dato que mueve a la preocupación son los 126 nuevos diagnosticados ayer, una cifra que establece una nefasta marca en la incidencia del coronavirus en el área.
Y de forma paralela al repunte en los casos activos, la presión hospitalaria se acrecienta. Sanidade contabiliza este lunes 77 (+9) pacientes hospitalizados en el área sanitaria: 13 (+1) en la UCI y 64 (+8) en planta (52 repartidos entre Montecelo y Provincial, 9 en el Hospital de O Salnés y otros 3 en el QuirónSalud Miguel Domínguez).
Las 856 pruebas PCR de ayer arrojaron 112 nuevos diagnósticos frente a las 20 altas prescritas. Desde marzo se han recuperado del virus 6.951 personas mientras que otras 91 han perdido la vida. La última, una mujer de 78 años ingresada en Montecelo y que presentaba patologías previas. Las PCR efectuadas se elevan a 125.179 y los test serológicos a 48.294.
