La lonja de Campelo también inicia el año con una reducción significativa tanto en la cantidad de producto vendido como en los ingresos.
El año pasado se vendieron algo más de 527.000 kilos, frente a los 724.000 de 2018, lo que supone más de un 27 por ciento menos. Asimismo, frente a los casi 7,5 millones de euros que se recibieron por las ventas hace dos años, el año pasado no se alcanzaron los 5, esto es, un 33 por ciento menos.
Las especies más vendidas en esta lonja son la almeja, la navaja y el choco. En el caso de la primera, en las tres variedades más comercializadas (japónica, babosa y fina) se redujo la venta.
La japónica, la más abundante, pasó de 604.000 kilos vendidos hace dos años a algo más de 451.000 el año pasado. Se vendió a una media de 8,25 euros el kilo en lonja.
Se vendieron en 2019 más de 36.000 kilos de almeja babosa, mientras que el año anterior habían sido casi el doble: 70.500. El precio medio del kilo fue de 16,24 euros.
Por último, la más codiciada, la almeja fina, vendida a una media de 33,43 euros el kilo, cayó en más de 8.000 kilos, al pasar de casi 19.000 vendidos hace dos años a los poco más de 10.000 del que acaba de finalizar.
La navaja es la especie que ocupa el segundo lugar en ventas en la lonja de Campelo. Fueron casi 15.000 kilos el año pasado, a una media de 10,5 euros. En 2019 se habían contabilizado más de 17.000 kilos, a un precio medio de venta de 10,4 euros.
En cuanto al choco, también cayó, pero menos. Pasó de 7.400 kilos a algo más de 7.100. El precio medio el año pasado fue de 6,24 euros.
