La avenida de Vigo y su entorno ultiman sus obras de reforma urbana, según ha podido comprobar hoy el alcalde Miguel Fernández Lores y el concejal de Obras, Demetrio Gómez.

Ambos visitaron el resultado de las obras de la calle Herminia Fariña Cobián y el estado de la reurbanización del último tramo de la avenida de Vigo hacia el nudo de O Pino que está pendiente de los remates finales.

Las obras en la calle Herminia Fariña Cobián, que sirve de acceso al IES Torrente Ballester tuvieron un presupuesto de 241.349,90

euros y consistieron en la ampliación de las aceras dejando un único carril de circulación, de salida, en su primer tramo, desde la avenida de Vigo a la calle Pintor Manuel Colmeiro.

En el segundo, hasta la calle Pintor Virxilio Blanco se mantuvo la doble circulación, para permitir la distribución de tráficos en el barrio.

Se pusieron además pasos de peatones sobreelevados a un único nivel en los cruces.

El Concello destaca que cuando se hizo la redacción de la mejora de la movilidad en el entorno IES Torrente Ballester se tuvieron en cuenta dos condicionantes: el elevado tráfico peatonal de la zona ya que suben y bajan a diario 580 alumnos del centro de enseñanza, y el tráfico de salida.

Por su parte, la mejora de la movilidad en la zona se completa con el segundo tramo de la avenida de Vigo, en el

ntronque con el nudo de O Pino, una intervención para mejorar la movilidad cerrando el circuito de peones y el ajardinamiento.

Así, se reconstruyó la acera del último tramo, en la margen derecha de salida de la ciudad, y se eliminó un carril de circulación, dejando un solo como el resto de la calle. El espacio sobrante se incorporó a la zona verde de O Pino que será plantada y tratada con césped y arbolado.

El proyecto completará la senda peatonal que viene de Ponte del Couto y finaliza en una pista de tierra antes de llegar la Josefina Arruti. Se pretende completar esta senda hasta el paso de cebra de esta última avenida y continuar la ruta por la zona ajardinada hasta la avenida de Vigo.