Andrés V. F, fue detenido el 16 de diciembre de 2015 por la Policía Local instantes después de que propinase el puñetazo a Rajoy. Al día siguiente, su abogado manifestó al término de su declaración judicial que se había arrepentido de lo sucedido, algo que reiteró en el momento en el que trascendió la sentencia impuesta con la conformidad del propio acusado. Fueron dos años de reclusión en el centro de menores de Monteledo de Ourense.

El joven, que tenía en aquel momento 17 años y aún era menor de edad, recuperó su libertad en diciembre de 2017 tras cumplir la pena de dos años de internamiento en régimen cerrado.

Aquel fallo también obligaba al entonces menor (alcanzó la mayoría de edad unos tres meses después de aquel suceso) a participar en un programa educativo. La finalización de la pena de internamiento estaba condicionada, además, a que el joven no cometiera ningún tipo de delito durante el año siguiente en el que estuvo en situación de libertad bajo vigilancia. La agresión de ayer se produjo quince meses después de su puesta en libertad.