El desprendimiento de parte de una balconada hoy de la fachada de un edificio en la confluencia de la calle San Román con la plaza de A Ferrería, en el casco antiguo de Pontevedra, a punto estuvo de provocar una tragedia. Una piedra de gran dimensiones y otros cascotes cayeron sobre la vía pública y faltaron centímetros para alcanzar de lleno a una viandante que caminaba por la zona. De hecho, la mujer resultó herida, en principio leve, no se sabe muy bien si al rozarle los cascotes en la caída o al tropezar con la piedra una vez que esta cayó al suelo.

En cualquier caso, el susto fue tremendo. La piedra se desprendió de una balconada situada en la fachada del edificio de la Librería El Pueblo que, curiosamente, hoy está cerrada por defunción. La responsable de un establecimiento situado al lado, "Hope", explicó que se encontraba dentro del local cuando "sentí un ruido muy fuerte y salí a ver qué pasaba". Relata que en ese momento vio a esta chica que se estaba "sacudiendo todo el polvo que tenía encima" como consecuencia del desprendimiento. "Nos dijo que estaba bien" y que no sabía muy bien "si fue la propia piedra la que le rozó al caerse o tropezó y se cayó una vez que ya la piedra había golpeado el suelo". "Vino la ambulancia y la atendió", añade, y "aunque no se fue en ella nos dijo que tenía dolor en un brazo y una pierna" y que "posiblemente acudiera a un centro médico".

El suceso se produjo sobre las once y media de la mañana y, una hora después, el lugar continuaba acotado por la Policía Local y los Bomberos trabajaban para sanear la fachada y comprobar si había riesgo de más desprendimientos.

Los comerciantes destacan la suerte de que el desprendimiento no se hubiera producido en los últimos días de campaña navideña en los que las calles estaban atestadas dado que probablemente hubiera podido tener un fatal desenlace, debido a las grandes dimensiones de la piedra. También destacan que justo hoy esté cerrada la Librería El Pueblo, por la defunción de uno de sus antiguos propietarios, dado que la piedra se derrumbó justo sobre la entrada al establecimiento. Varios comercios de la zona permanecían sin actividad al encontrarse la zona acotada.