Unos 400 jóvenes entre 16 y 21 años en situación de "desamparo" por razones familiares son atendidos cada año por la Xunta a través del Programa Mentor para adquirir la autonomía personal y la formación laboral necesarias que les permitan afrontar la vida de manera independiente. En 2016 un total de 227 usuarios integrados en este sistema de protección lograron un empleo, según el conselleiro de Política Social, José Manuel Rey Varela.

Acompañado por el vicepresidente de la Xunta y conselleiro de Presidencia, Alfonso Rueda; la directora xeral de Familia, Infancia e Dinamización Demográfica, Amparo González; y el delegado territorial de la Xunta en Pontevedra, José Manuel Cores Tourís; acompañaron ayer a Rey Varela y al director del Programa Mentor, Carlos Rosón, en un desayuno con los jóvenes alojados en un piso tutelado en Pontevedra, con capacidad para ocho plazas, de las cuales actualmente hay cuatro ocupadas.

"No se trata de paternalismos ni de ayudar a cualquiera más allá de lo que necesitan y merecen", señaló Rueda, que precisó que "estos jóvenes merecen esta oportunidad por parte de la Administración".

"No es que no tengan familia. Es que Galicia es su familia", precisó el titular de Política Social, que busca que esta comunidad sea "el mejor lugar para ser niños y niñas" por la puesta en marcha de iniciativas como esta. Con ella se busca "defender la igualdad de oportunidades" de los jóvenes en riesgo de exclusión social, que estén o hayan estado bajo tutela o guardia de la Administración, sujetos a medidas judiciales o sean usuarios de otros programas de protección.

Para ello, la Xunta destina 1,6 millones de euros al Programa Mentor, que también cuenta con financiación del Fondo Social Europeo.

"Volar solos"

Por su parte, el director del Programa Mentor, Carlos Rosón, destacó que los usuarios de las nueve viviendas repartidas por Galicia "ni son delincuentes, ni son problemáticos".

De estos nueve alojamientos, tres se encuentran en la provincia de Pontevedra. La capital cuenta con una tutelada, mientras que Vigo tiene las dos restantes. Una de ellas, también tutelada. En la otra, "los niños viven solos y el educador pasa todos los días para controlar sus progresos".

Rosón también indicó que, mientras que la edad media de emancipación de los jóvenes está en los 29 años, estos "con 18 tienen que volar solos". En este sentido, el Programa Mentor les proporciona acceso a "inserción laboral, ayuda económica y recurso residencial".

La estancia de cada joven se sitúa entre los nueve y los 12 meses. En algunos casos, como estar realizando estudios universitarios, la ayuda puede ampliarse hasta que cumplen 25 años.

José Manuel Rey informó que desde la puesta en marcha del Programa Mentor en 1998, "en los últimos años está dando los mejores resultados", argumentando que "muchos logran la plena inclusión". Así, el pasado año se registraron 534 beneficiarios y la cifra de contratación se incrementó un 224% con respecto a 2010, según datos de la Consellería de Política Social.

Para Alfonso Rueda "es bueno que se sepa" la existencia de estas viviendas en las que los jóvenes "aprenden a hacer muchas cosas antes que mucha gente" a su edad. "Administran su dinero, estudian, buscan trabajo, adquieren responsabilidades, luchan y se superan", resaltó el vicepresidente de la Xunta, quien se refirió a este programa como una "escuela de vida" y una "oportunidad" que los usuarios "aprovechan de verdad" tratándose de jóvenes que atraviesan una "situación más complicada".