El alcalde de Poio, el nacionalista Luciano Sobral, lamentó ya hace unos diez años la postura del gobierno bipartito hacia el proyecto que pretendía levantar cuatro bloques de diez viviendas sociales en O Vao como alternativa residencial a las chabolas del poblado. "A día de hoy yo sigo defendiendo que esta sigue siendo la solución para O Vao", explicaba ayer Sobral. Considera que este proyecto "no tiene por qué suponer un gueto", sino un grupo de familias de una misma etnia residiendo "en un piso de protección oficial y en un entorno urbanizado".

Mientras los planes para acabar con la marginalidad en este asentamiento se mantienen parados, el alcalde de Poio explica que el Concello se afana en prestar la asistencia social necesaria a los residentes en el poblado y en asesorarlos en cuestiones como la tramitación de la Risga así como otras prestaciones.