La fiscal especializada en violencia contra la mujer de Pontevedra solicita una pena de cinco años de prisión para José Manuel Torres Casalderrey, el vecino de Tomeza que ya en 1987 fue condenado por parricidio tras matar a su mujer un año antes. Ahora Torres Casalderrey volverá en unos meses al banquillo de los acusados de un juzgado de lo Penal por un nuevo episodio de violencia de género, en este caso contra la que era actualmente su compañera sentimental.

Fuentes de la Fiscalía confirmaron que José Manuel Torres Casalderrey está acusado de un delito de lesiones agravadas por tratarse la víctima de su pareja. Destacan, además, que los cinco años de condena que se solicitan para el procesado es la máxima pena que recoge el Código Penal para el ilícito que se le imputa, debido a la gravedad de los hechos que supuestamente protagonizó el pasado mes de octubre y ante los antecedentes que tiene en su historial.

Cabe recordar que, el pasado 4 de octubre, José Manuel Torres Casalderrey fue detenido por las fuerzas del orden en Pontevedra después de dar una paliza a esta mujer que era su actual compañera sentimental en una vivienda del casco histórico de la ciudad del Lérez. Al parecer, José Manuel, que actualmente tiene unos 64 años de edad, habría propinado puñetazos y golpes por todo el cuerpo a la mujer. Unas lesiones que se agravaron debido a la edad de la víctima, bastante mayor con respecto al supuesto agresor.

Cuando los agentes pusieron a esta persona a disposición judicial en A Parda, comprobaron como en su historial ya constaba otro caso anterior de violencia de género de extrema gravedad. La Audiencia de Pontevedra lo condenó en abril de 1987 a 23 años de reclusión mayor como autor de un delito de parricidio al dar muerte de una cuchillada a su esposa, Carmen Couto Villaverde, el 13 de octubre de 1986 en la casa familiar en la que ambos vivían en Tomeza. Tras comparecer ante el juez de instrucción, se decretó su ingreso en prisión preventiva en el centro penitenciario de A Lama. Allí le fue notificada estos días la petición de condena de cinco años de prisión que formula ahora el Ministerio Público por este nuevo caso de malos tratos que habría protagonizado en octubre.

Al parecer, según fuentes conocedoras del caso, la víctima de esta última agresión desconocía que este pontevedrés con el que mantenía una relación había sido condenado en pasado por acabar con la vida de su esposa. De hecho, parece ser que el detenido controlaba con celo las salidas que la mujer efectuaba de su casa, las personas con las que hablaba o el uso que pudiera realizar del teléfono. Un comportamiento que, a posteriori, la víctima relacionó con un posible intento de José Manuel Torres por evitar que ella pudiera enterarse de su oscuro pasado.

La mayoría de los vecinos de Tomeza todavía recuerdan con nitidez y conmoción aquella trágica jornada del 13 de octubre de 1986 cuando José Torres Casalderrey acababa con la vida de su esposa Carmen. Ocurrió en la casa en la que convivían con dos hijos de 11 y 13 años. Sin embargo, tanto los vecinos como la familia de la víctima prefieren pasar página y olvidar aquel episodio así como al presunto agresor, de quien no tenían noticias desde que ingresó en prisión en la década de los ochenta. Muchos de ellos desconocían que estaba ya libre y que había vuelto a ingresar en la cárcel por un nuevo caso de malos tratos hasta que la noticia saltó a los medios de comunicación el pasado mes de enero.