Los dos incidentes del pasado fin de semana relacionados con altercados durante la movida pusieron de manifiesto el incremento de la presencia de armas blancas en las reyertas en las que se ve obligada a intervenir la Policía Nacional de Pontevedra. Cabe recordar que ambas intervenciones se saldaron con dos detenciones, la de un pontevedrés que amenazó con un cuchillo a los trabajadores de un "after" de la avenida Buenos Aires y la de una mujer también vecina de la capital y de nacionalidad colombiana que acuchilló a un joven en un brazo causándole una herida que precisó siete puntos de sutura.

Tan sólo echando un vistazo a las intervenciones que saltaron a la luz pública desde el pasado mes de agosto, se contabilizan al menos una docena de casos en los que los agentes tuvieron que intervenir en discusiones, reyertas o amenazas en las que los implicados portaban o esgrimían un arma blanca, en la mayor parte de los casos, cuchillos.

Afortunadamente, la mayoría de los incidentes se saldaron sin heridos, aunque en dos de los casos hubo lesionados, el del pasado fin de semana y otro el sábado 6 de agosto que terminó con una mujer herida en una mano con un navajazo. No obstante, el incremento de la presencia de este tipo de armas preocupa a distintos sectores, como es el caso del Sindicato Unificado de Policía, SUP, cuyo responsable provincial, Marcos Castro, confirma que cada vez es más habitual encontrarse con algún tipo de arma blanca en estos altercados.

El caso del pasado fin de semana, en el que una mujer de 35 años de nacionalidad colombiana resultó detenida, cabe destacar que parece ser que la agresora portaba encima el cuchillo en el momento en el que se desató una discusión fortuita, lo que da a entender que se dispuso a disfrutar de una noche de movida acompañada de este tipo de arma. Al menos otros dos casos están relacionados con la movida nocturna, como son las amenazas que profirió un varón que resultó detenido a otras dos jóvenes con una navaja antes de rociarlas con un espray de autodefensa el 20 de septiembre.

Por otra parte, otros tres episodios están relacionados con personas que padecen algún tipo de trastorno y que muestran una conducta violenta. A finales de julio un varón amenazó al personal médico de Montecelo y el 6 de septiembre un hombre de nacionalidad marroquí irrumpió en Comisaría con un cuchillo amenazando con matarse él o a alguno de los agentes si no lo devolvían a su país.

En septiembre se produjo otro episodio violento en el hospital de Montecelo y ese mismo mes otra persona que escondía un cuchillo en un calcetín amenazó reiteradamente a clientes y trabajadores de una panadería de la Plaza de España.

Otro ámbito en el que se produjo un altercado con arma blanca es el de la violencia en el ámbito familiar, ya que el 20 de septiembre un joven de 18 años fue detenido tras amenazar a su madre con un cuchillo en Loureiro Crespo. Por último, también se utilizaron armas blancas en el último atraco de entidad cometido en la comarca. Lo sufrió un joyero en Seixo, Marín, siendo detenidos los autores en Pontevedra.