La presa del río Umia, así como las redes de abastecimiento de la comarca, están pendientes de la evolución de la cianobacteria que cada verano complica el suministro de agua. Hace unos días Augas de Galicia anunció los primeros trabajos de aplicación de corteza de eucalipto como medida para frenar la proliferación de la microcistina que tiñe de verde el agua del río. El organismo autónomo comunicó al Concello la instalación de una estructura compuesta por una serie de sistemas flotantes que estarán fijados al fondo del embalse con anclajes y que permitirán albergar las cantidades de corteza necesarias para efectuar el tratamiento en la presa de A Baxe.

La superficie estimada en la que se aplicará este tratamiento es de 45 hectáreas y se prolongará durante un año. Según los últimos análisis de proliferación de cianobacterias este alga tóxica alcanza las 13.250 células por milímetro de agua. La Consellería de Medio Ambiente cuenta con 22 millones de euros para invertir entre 2011y 2015 para eliminar las cianobacterias de la presa que se crea debido a la falta de saneamiento y la actividad agroganadera y la ausencia de bosque de ribera.