La Diputación de Pontevedra iniciará los trámites para proceder al desahucio de tres viviendas de la residencia infantil Príncipe Felipe que en la actualidad están ocupadas por particulares. El proceso de desahucio obedece al propósito de crear en el edificio una residencia para disminuidos psíquicos.

El presidente del organismo, Rafael Louzán, explicó que de esta forma se podrán destinar las 33 viviendas de los tres bloques a fines sociales, "e non para usos privados, como se viña facendo con títulos de uso das residencias e en ningún caso con título de propiedade nin de arrendamento", dijo. Actualmente de esas 33 viviendas siete siguen estando ocupadas de forma correcta, es decir, con derechos reconocidos. De las restantes 26, sólo diez están habitadas sin derechos.

"Delas, seis xa manifestaron a súa vontade de entregar as chaves, mentras que outra solicitou un aplazamento ata finais de ano", indicó. Sin embargo, en los otros tres casos restantes, el gobierno provincial acordó ayer proceder al desahucio repercutiendo en los actuales ocupantes los gastos que se deriven del proceso de desalojo.

Rafael Louzán señaló que todas las viviendas serán destinadas a fines sociales. "Oito destas vivendas serán cedidas á asociación Alba de Pontevedra para que as destine a residencia a tempo completo para disminuidos psíquicos". Además, puntualizó que los jóvenes residentes en ella completarán su formación y actividades en los talleres de la residencia Príncipe Felipe.

Además, el mandatario provincial también explicó que las restantes viviendas se destinarán a fines sociales. De todos modos, no concretó exactamente cuál sería la utilización que tendrían.