Prisión para el agresor que intentó matar a su pareja y saltó por la ventana: del hospital a la cárcel tras el alta

M. R. O., el hombre que presuntamente agredió de forma brutal a su pareja, la madrugada del domingo al lunes, en una vivienda de la calle Cibeles del barrio ourensano de Covadonga, ha permanecido en el servicio de Traumatología del hospital. La magistrada Eva Armesto, titular del juzgado de Instrucción Número 3 de Ourense –el órgano especializado en los delitos contra la violencia machista–, ha acordado el ingreso en prisión provisional de este investigado. La medida cautelar no admite fianza.

Por el momento, dado su estado de salud –sufrió lesiones en las piernas al intentar huir de la Policía saltando por la ventana–, el presunto agresor se quedará en el módulo penitenciario del hospital de Ourense, una unidad en la que los reclusos y detenidos que necesitan asistencia sanitaria están en una instalación segura, bajo vigilancia policial. En el momento en el que los sanitarios decidan que puede recibir el alta médica, M. R. O. será trasladado a la prisión. Previsiblemente, al centro penitenciario de Pereiro de Aguiar, el de referencia en la provincia de Ourense.

El presunto agresor, de 51 años, queda investigado por un presunto delito de homicidio en grado de tentativa, la misma calificación que le atribuía la Policía Nacional. La concreción del delito, en todo caso, dependerá de lo que se determine en la fase de investigación, así como de la propia evolución de la víctima, que se encontraba en estado grave, tras sufrir lesiones en la mandíbula, la dentadura y un brazo, presuntamente causadas por su pareja en una agresión brutal. La víctima ha tenido que ser intubada.

Constaba una denuncia por violencia machista contra el investigado, pero su caso figuraba ya como inactivo en Viogén, el sistema de seguimiento de los agresores y de protección a las víctimas. En el año 2001 fue condenado por la Audiencia Provincial de Ourense a 15 años de prisión, por el asesinato de un joven de 22 años e hijo único, la madrugada del 30 de julio de 1999. Ocurrió en la misma calle (Cibeles) del mismo barrio de Ourense (Covadonga), con una diferencia de casi 25 años.

Estuvo cumpliendo esa condena hasta que salió de la cárcel en 2014. Casi 25 años más tarde del asesinato, el sospechoso atacó presuntamente a su pareja sentimental, de nuevo en la calle Cibeles. La huida con el objetivo de eludir a los agentes que se presentaron en la vivienda tras ser alertados le salió mal al agresor, porque resultó herido, tras precipitarse a la calle desde varios metros de altura.