Su conducción errática delató a un ciudadano portugués que en la madrugada del pasado domingo circulaba por Verín superando la tasa máxima de alcoholemia permitida. Una patrulla de la Guardia Civil lo detectó en la carretera OU-1007 hacia Feces de Cima y, al darle el alto, descubrió que llevaba un arma larga a mano. Esta se encontraba entre los asientos anteriores del vehículo y con el cañón hacia la parte delantera, informa el Instituto Armado.

El conductor, que manifestó que carecía de la documentación de la escopeta, arrojó una tasa de alcohol superior a 0,60 miligramos por litro de aire espirado, lo que constituye un delito penal.

Por ello, el varón de 48 años de edad, fue detenido por superar los niveles de alcohol permitidos y tenencia ilícita de armas. El conductor se podría enfrentar a penas de prisión de uno a dos años, multa de seis a doce meses y privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores de seis a diez años.