En mayo de 2015, el pianista francés Jean-Michel Pilc (París, 1960) actuó en Ourense, en el Café Latino, en un concierto de jazz junto a dos de los músicos con los que formó un trío tras su llegada a Nueva York en los noventa: Ari Hoenig (batería) y François Moutin al contrabajo.

Pilc regresaba ayer a la ciudad de As Burgas –antes estuvo en Nigrán y hoy, en A Coruña– y, en el conservatorio local, se desempeñó en dos facetas: la de un intérprete con alta prestancia –es uno de los mejores pianistas de jazz del mundo, afirma el saxofonista ourensano Xose Miguélez, con el que está grabando el próximo disco del gallego, ‘Contradictio’ (Origen Records), en el que también participan Carlos Barretto y Marcos Cavaleiro –, y la de un ejemplo vivo para futuros músicos.

Por la tarde ofreció un concierto de piano solo, después de ilustrar por la mañana a profesores y alumnos de los últimos cursos del grado profesional de música, quinto y sexto.

Pilc, al piano, junto a profesores del conservatorio de Ourense. // IÑAKI OSORIO INAKI OSORIO

“Es una forma de traspasar mi experiencia musical a las nuevas generaciones, sobre todo esa información que no está en los libros y que he ido adquiriendo a base de tocar con otros músicos durante toda mi carrera”, destaca Pilc, que descubrió el jazz siendo niño y perfeccionó su estilo de forma autodidacta.

Su consejo para los estudiantes, futuros intérpretes profesionales, es que “para llegar a vivir de la música hay que hacer de ella tu propia vida y confiar en tu instinto. Es necesario hacer caso de los consejos, pero sin desviarse de lo que tú crees que es tu camino, siendo un músico honesto y respetando siempre a la música por encima de uno mismo”, dice a FARO.