La Junta de Portavoces convocada por el Gobierno local para intentar avanzar en el proyecto de residencia de mayores que se ubicaría en la parcela de la antigua estación de autobuses –en el barrio de O Pino– no sirvió para llegar a un entendimiento entre las partes que evite a la Xunta tener que hacerse cargo de la ejecución del mismo.

Flora Moure, concejala del PP, reseñó al remate de la reunión que, antes de llevar el asunto por cuarta vez a un pleno, era necesario reunir a las fuerzas políticas para evitar más dilaciones y llegar a un acuerdo. “La situación es surrealista porque ninguno de los portavoces de los grupos políticos, tanto del BNG como del PSOE, han movido ni un ápice sus pretensiones. Han acudido con los argumentos que ya tenían del cambio de parcela y lo único que nos han dejado claro es que la ciudad de Ourense no les importa. Ni siquiera han querido formular preguntas a los técnicos que nos acompañaban”, destacó la popular sobre el encuentro.

El nacionalista Luis Seara afirmó no entender por qué motivo volvían a convocar a los grupos “cuando en el último pleno el propio alcalde afirmó que iba a solicitar la tramitación del proyecto a través de la ley 3/2016 de medidas en materia de proyectos públicos de urgencia o de excepcional interés”.

Tanto desde DO como desde el PP subrayan que sacar adelante el proyecto por esta vía retrasaría la ejecución de la obra más tiempo del ya transcurrido.