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Retrato de Ana, la joven asesinada en Velle, "una estudiante trabajadora y encantadora”

El detenido por matarla y herir de gravedad al novio pasa hoy a disposición judicial

La casa en la que vivían las víctimas y donde ocurrió el crimen. // FERNANDO CASANOVA

“A comunidade educativa do CIFP Portovello manifesta o seu profundo pesar polo pasamento da alumna Ana B. R. Nestes duros momentos queremos brindar o noso apoio a súa familia e achegados”. En este centro de formación profesional estudiaba la joven víctima del crimen de Velle, de 22 años. En esos términos expresaban ayer su consternación en la página web, con un crespón negro de luto y una cita de Alejandro Dumas: “Los seres queridos que perdemos no reposan bajo la tierra, sino que los llevamos en el corazón”.

Ana B. R. tenía una hermana y era natural de A Peroxa, donde residen sus padres. Acudía con frecuencia a la localidad, en la que era una vecina apreciada, tal y como transmite Manuel Seoane, el alcalde de este municipio ourensano de 1.800 habitantes. “Parece que sean las mejores personas las que más sufren, porque era estupenda y encantadora. Daba gusto tratar con ella, era una maravilla”, elogiaba ayer el regidor, quien tras conocer el trágico suceso se puso en contacto con la familia de la víctima para transmitirle el pésame. El progenitor se había jubilado hace unos meses, después de haber trabajado en una empresa de instalaciones eléctricas.

Desde hacía unos meses, Ana B. R. vivía a 20 kilómetros de A Peroxa, en el barrio de A Batundeira, en la parroquia ourensana de Velle, junto a su novio, que resultó malherido en el ataque, Álvaro B. F., de 25 años, apasionado de los coches y el mundo del motor, aficionado a la práctica en circuitos de la conducción tipo drift. Álvaro trabaja en la empresa familiar, del sector del transporte. En la casa de Velle, contigua a la del agresor, en la que la joven pareja convivía desde hace poco, también habitan los padres del joven agredido, quienes no se encontraban en el lugar la madrugada del viernes, cuando ocurrieron los hechos. A ellos fue a quien alertó el chico tras el brutal ataque perpetrado presuntamente por su primo Diego.

Ana seguía visitando a menudo a sus allegados en A Peroxa. “No solo estudiaba sino que también trabajaba por periodos de fines de semana en la hostelería e incluso en las vacaciones. Estaba ocupada para ganarse la vida”, decía el alcalde Manuel Seoane, conmocionado él también por la tragedia. “Es una pérdida tremenda”, manifestó.

El cuerpo sin vida de la joven fue trasladado, en un primer momento, al Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO), donde el forense llevó a cabo la prueba de autopsia, como en todo caso de muerte violenta.

El Imelga aportará al juzgado un informe preliminar sobre las causas del fallecimiento, identificando las principales lesiones. Una vez finalizado el examen postmortem, la funeraria de A Peroxa trasladó a la joven fallecida a su localidad natal, donde tendrá lugar el velatorio y el posterior entierro.

El detenido por el crimen de Velle, Diego T. / Fernando Casanova

El detenido por el crimen de Velle pasa hoy a disposición judicial

Diego T., de 35 años, el presunto atacante de la tragedia de Velle, con una joven de 22 años asesinada y su novio de 25 (primo del agresor), en estado crítico, pasa hoy sábado a disposición judicial del magistrado de guardia de Ourense, Luis Doval.

El juez acordó ya ayer que el investigado sea reconocido por el forense, para determinar sus capacidades, ya que, según manifestó el comisario de Policía Nacional, el detenido estaba "catatónico, alejado de la realidad, no era consciente", cuando los agentes llegaron a su casa, contigua a de las víctimas, para arrestarlo. El objetivo es establecer si puede declarar, mediante un examen preliminar de capacidades, para que el juez, atendiendo a la evaluación realizada por el Instituto de Medicina Legal (Imelga), en el propio momento de la puesta a disposición judicial, resuelva si procede su ingreso en prisión o una estabilización previa, con un tratamiento en el hospital.

El chico malherido, Álvaro B. F., permanecía a primera hora de este sábado ingresado en el servicio de Reanimación del hospital de Ourense, luchando por su vida.

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