El escuadrón sanitario del programa de vacunación contra el COVID del área sanitaria de Ourense, Verín y O Barco es uno de los más rápidos de España en la administración de la dosis. Sin datos por provincias, solo por comunidades, la de Ourense es una de las que más rápido acabaron la primera fase de la administración de dosis donde se vacunaron a 8.000 personas, entre residentes y trabajadores, de los geriátricos ourensanos y a más de 3.000 sanitarios de los servicios asistenciales que son dique de contención contra el virus. Josefa Rodríguez y Dolores Durán se encargaron de hacer un análisis de 20 días de trabajo intenso de los 11 equipos de enfermeros, recorriendo una provincia tan dispersa y con la nieve como enemigo. Josefa explica que “en estos momentos podemos decir que está saliendo todo bien. Las primeras dosis se pusieron sin ninguna incidencia y no tuvimos ninguna reacción grave, así que podemos estar satisfechos con la primera fase de la vacunación. No puede ser más positivo”. Y añade que “la respuesta de la gente fue impresionante y tienen esperanza de que sea el principio del fin, para poder acercarse a sus familias y estar juntos otra vez. Nuestros mayores de las residencias estuvieron aislados y la vacunación supone un primer paso para volver a la ansiada normalidad”. Las coordinadoras del programa no tienen constancia de la negativa de ningún sanitario para vacunarse y dicen que “hubo una respuesta masiva”.

La tercera ola del virus en la provincia ya provocó dos rebrotes importantes en residencias ourensanas, con la de Quercus de Leiro o el Fogar de Santa María de Verín. Ambas ya vacunadas de la primera dosis tendrán que esperar a que negativicen todos los positivos para administrar la segunda dosis de la vacuna. Para ello, los equipos de coordinación aplazarán en estos casos la administración hasta una situación óptima de cero casos. En La Residencia Nuestra Señora de la Esperanza en A Farixa se seguirá la programación habitual que marque Dirección Xeral de Saúde Pública.