En la historia minera de la provincia de Ourense existen varios lugares en los que se ha explotado el oro, y en la actualidad se trabaja en volver a extraer este preciado metal, concretamente en la mina de Brués, en el Concello de Boborás, de la que constan extracciones a principios del siglo XX y en la década de los 70. Hace aproximadamente tres años que se realizaron unos sondeos, y ahora se trabaja en buscar la mejor manera de extraer el oro de la roca.

Desde el grupo Exploraciones Mineras de Andévalo S.L., con sede en León, aseguran que de todos los yacimientos auríferos ourensanos, el de Brués es “el mejor proyecto para minería interior”.

En el municipio de Boborás hay indicios de más yacimientos de este mineral pero según el inglés Dixon Porter, geólogo de la empresa, o carecen de interés o están en lugares complicados, y en la comarca también hay muchos más. Destaca que hay minas romanas, excavaciones grandes, y otras explotaciones antiguas que son pequeñas como la de Brués, pero lo que hace especial ésta última es que “tiene un contenido de oro lo suficiente elevado como para justificar su explotación”, además de que “es una minería pequeña, de alta calidad”, y a mayores “es la mejor opción para minería de interior”. Advierte de que la extracción a cielo abierto en Galicia “es complicada”.

Así, obtenidos los permisos de sondeo abordaron los trabajos de investigación de campo hace unos tres años aunque, según Porter, “ya sabíamos desde hace 40 años que estaba ahí” pero entonces constaba en manos de la empresa estatal de investigaciones mineras, y luego estuvo afectada con derechos de aguas termales, por lo que cuando por fin salió a concurso “la pedimos”.

Y tras conseguir el permiso de sondeo de investigación en la mina, ahora trabajan en buscar la mejor manera de extraer el oro de la roca mediante un proceso “lo más sencillo posible”, investigando “distintas maneras de optimizar la recuperación del oro”, ya que “queremos evitar procesos complicados o agresivos”. Mientras no se logre esta finalidad no se volverá al trabajo en campo, ya que aunque sacar el oro es fácil “hay restricciones medioambientales que queremos respetar”. También tienen previsto hacer un estudio de impacto ambiental. Tras cumplir con todo ello, y una espera de 40 años, pedirán la concesión minera de interior. Lamenta Porter que se trata de un proceso administrativo lento, y señala que en minería subterránea la mina de Brués es la más interesante y la mejor opción de toda la provincia, aunque es un yacimiento pequeño y de poco volumen pero de “alta calidad”.

La extracción mínima para que una explotación de oro sea rentable es de 5 a 7 gramos por tonelada de filón de cuarzo, y en el caso de Brués se superan estas cifras.