LA LOTERÍA DE NAVIDAD EN OURENSE

  • 52472 (3º premio)   500.000 €. Ourense: 10 décimos
  • 43831 (5º premio)   66.000 €. Ourense: 10 décimos; O Carballiño: 1    
  • 86986 (5º premio)   18.000 €. A Peroxa: 2 décimos; O Carballiño: 1
  • Ventas:   13,566 millones

El año que la mayoría del planeta quiere dejar atrás, el 2020 de la pandemia, ha deparado grandes momentos de felicidad, personal y profesional, a Jorge Anta. Este lotero ourensano de 41 años, que heredó en 2007 un negocio que su padre Julio operaba desde 1981 en Ourense, despachó una serie completa del tercer premio de Navidad, el número 52472. Diez décimos que para los afortunados, cuya identidad no desvelará aunque llegue a averiguarla –“es como el secreto de confesión de un cura”, compara–, reportan un total de medio millón de euros, 50.000 cada boleto.

El grueso de la recompensa que el azar dejó ayer en la provincia de Ourense –584.000 euros, sumando otros dos quintos premios que se despacharon en la ciudad, O Carballiño y A Peroxa– salió de esta administración de las Galerías Centrales, situada en el corazón de la capital de As Burgas. La serie de este tercer premio se vendió íntegramente en ventanilla.

En marzo, cuando la pandemia irrumpió y arrampló con todo, este negocio ya vendió una Primitiva de 11 millones, la recompensa de la lotería más elevada que ha recaído en esta ciudad. El 23 de septiembre, el administrador fue padre de un niño. “A todos nos ha afectado este año, en la salud y en la economía, pero también quedará como el del nacimiento de mi pequeño y el del reparto de dos premios importantes. Para un lotero, repartir premios en el sorteo de Navidad es como un cum laude para un estudiante”, expresa Jorge Anta.

Él todavía “gateaba”, tenía dos años, cuando su padre comenzó con la administración. Con 22 empezó a trabajar en el negocio, en el que ayer disfrutó de una celebración que satisfacía a los clientes. Es su primer premio importante de Navidad. “Era la barrera que faltaba, la espinita clavada”, admite. “O cada décimo fue a una persona o, como mucho, una se llevó dos. Es un medio millón muy repartido. Es lo que se busca en los sorteos”, destaca Anta. El 43831 se vendió en esta administración entre el 30 de agosto y septiembre y octubre.

Ourense es la provincia gallega que menos había invertido en el sorteo navideño. Las ventas en este territorio fueron de 13,566 millones de euros, de un total de 149,371 millones en el conjunto de la comunidad. En Lugo, con una población similar a la de Ourense, la cifra de negocio fue muy superior, de 23,355 millones.

Alegría en un bar recién abierto

En el bar Estate quieto, de O Carballiño, vendieron un décimo de otro quinto premio. CARLOS PETEIRO

La suerte con derivada ourensana se manifestó pronto ayer, poco después del comienzo del sorteo extraordinario de Navidad. Un quinto premio, el número 86986, recompensó con un total de 18.000 euros a los portadores de tres décimos vendidos en A Peroxa y O Carballiño. En el primer municipio, el bar Malé, que apenas lleva cuatro meses de actividad en un periodo muy complejo para la hostelería, la gerente, Conchi Pereira, mostraba su felicidad por poder dar buenas noticias. En su establecimiento se vendieron dos décimos (12.000 euros). “Estaba en el supermercado y me llamó mi hijo para contármelo. La verdad es que da gusto porque acabo de abrir, como quien dice, y también es una satisfacción después de todo el lío en el que estamos”. La hostelera supone que el agraciado o agraciados será “alguien cercano, me imagino que un vecino de todos los días, cosa que también me alegra”.

Este quinto premio se vendió, asimismo, en el bar Estate quieto, del núcleo urbano de O Carballiño, de donde salió un décimo por máquina. Es el premio más importante que ha despachado este local hostelero en los más de tres años que lleva en manos de Álex, su responsable. “Casi seguro que se ha quedado en el pueblo. Por la mañana me llamó el hombre que me alquila el bar, me preocupaba que pudiera ser por algo malo pero no, era por una buena noticia”.

“Dar un premio te da la vida”

Otro quinto premio, el 43831, deja 66.000 euros en Ourense. La gran mayoría –60.000– son la suma de los diez décimos despachados en papel en la administración El Mirlo Blanco, del barrio A Ponte. “Estoy seguro de que fueron ventas individuales, porque se hicieron en días distintos, desde finales de agosto a principios de septiembre. Yo creo que se quedó aquí, porque este año no hubo muchos turistas”, barajaba ayer David Álvarez, el gerente.

Hace tres años ya despachó un segundo del sorteo navideño. “Siempre es una satisfacción. Hoy es un día para las loteros positivo, aunque des solo una pedrea o un pellizquito. Te da la vida, porque son meses de trabajo, desde que empiezas en julio”. El bar Lérida, de O Carballiño, vendió un décimo del 43831. El agraciado se llevó un boleto elegido al azar, por máquina. En los dos años y medio que Andrés lleva al frente del negocio, ya son dos los aciertos que ha podido celebrar: este quinto premio, de ayer, y un Euromillones que el año pasado dejó un millón en esta localidad ourensana.